Eto'o dice haber cumplido e insinúa que espera una mejora de contrato

Samuel Eto'o está orgulloso. De lo que ha hecho y de lo que todavía puede hacer, de la Liga ganada, de los 25 goles marcados y de lo que puede conseguir: "He cumplido con lo que prometí", repitió ayer, reivindicándose de tal manera que parecía pedir aumento de sueldo. "Al principio, pocos confiaban en mí. La mayoría decía que yo no era un goleador, que era polémico, que no entendía los pases de Ronaldinho, que no marcaba de cabeza. El que nos dio la Liga lo metí de cabeza, he corrido como prometí para ayudar a mis compañeros a ganar el título y he trabajado dentro del vestuario por el equipo. ...

Samuel Eto'o está orgulloso. De lo que ha hecho y de lo que todavía puede hacer, de la Liga ganada, de los 25 goles marcados y de lo que puede conseguir: "He cumplido con lo que prometí", repitió ayer, reivindicándose de tal manera que parecía pedir aumento de sueldo. "Al principio, pocos confiaban en mí. La mayoría decía que yo no era un goleador, que era polémico, que no entendía los pases de Ronaldinho, que no marcaba de cabeza. El que nos dio la Liga lo metí de cabeza, he corrido como prometí para ayudar a mis compañeros a ganar el título y he trabajado dentro del vestuario por el equipo. He cumplido con todo y ahora me tiran flores", aseguró Eto'o.

Dado que su representante, Jose María Mesalles, asegura que Eto'o merece una revisión de su contrato, se le preguntó si está de acuerdo: "El problema es que no paga él, paga el Barça". Y explicó una anécdota: "El día de mi fichaje le dije al presidente lo que pensaba: 'Usted ahora me paga esto, pero yo voy a jugar y ya veremos después en qué casilla me pone'. Yo he cumplido. Ahora le toca a él. Si no me sube el sueldo, no pasa nada. Firmé un contrato y me siento bien pagado, no me enfadaría si el club no lo toca", confesó antes de añadir: "Me merezco un premio, pero el resto de mis compañeros, seguramente también".

Insistió en que si el Barça pagó 24 millones por él no es su problema, pero añadió: "Ahora, si me venden, ganarán mucho dinero. Los que se tienen que tirar de los pelos son los que me dejaron marchar". Entre risas, soltó: "Me refiero al Mallorca, no he dicho nada del Madrid, que ya veo los titulares". Ayer supo que le han caído 12.000 euros de multa por su frase "Madrid, cabrón, saluda al campeon". "No entro en si es justo o no. Ya veremos si recurrimos la sanción. Eso sí, me parece rídiculo que a un club le caigan 300 euros por gritos racistas en la grada y a mí 12.000 por lo que dije".

El camerunés afirmó que el año será perfecto "si se salva el Mallorca, aunque yo no consiga el Pichichi. Sé que he hecho bien mi trabajo y si Dios quiere marcaré en San Sebastián". Reconoció que el pasado domingo, contra el Villarreal, se equivocó: "Busqué sólo el gol. Me olvidé incluso de que el resultado era lo más importante".