La Sindicatura pide al Instituto de Finanzas 6.000 euros sin justificar de la época de Uncio

El órgano auditor dice que este gasto, pagado con tarjeta, no es propio de su actividad

La Sindicatura de Comptes pide en su informe de 2003 sobre fiscalización de las cuentas del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) de la Generalitat, entonces dirigido por José Manuel Uncio, que "regularice", es decir devuelva o justifique, una serie de gastos de representación social por valor de 6.000 euros con tarjeta de crédito y "difícilmente imputables a la actividad propia del Instituto", dice el informe. El órgano de fiscalización asegura en el informe que no constan facturas o recibos acreditativos de los gastos realizados sino recibos de los pagos.

La Sindicatura de Comptes f...

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La Sindicatura de Comptes pide en su informe de 2003 sobre fiscalización de las cuentas del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) de la Generalitat, entonces dirigido por José Manuel Uncio, que "regularice", es decir devuelva o justifique, una serie de gastos de representación social por valor de 6.000 euros con tarjeta de crédito y "difícilmente imputables a la actividad propia del Instituto", dice el informe. El órgano de fiscalización asegura en el informe que no constan facturas o recibos acreditativos de los gastos realizados sino recibos de los pagos.

La Sindicatura de Comptes fiscaliza cada año las cuentas de la Generalitat, evaluando los sistemas de gestión y control interno, en este caso del IVF, señalando aquellas debilidades o situaciones detectadas en la auditoría "que deberán ser objeto de atención y mejora por parte de los responsables del instituto".

En su informe de 2003, presentado a finales del año pasado -las cuentas se auditan el año siguiente al cierre del ejercicio-, este órgano detectó incumplimientos relevantes de la normativa aplicable a la gestión de los fondos públicos, entre ellos, los gastos por atenciones sociales o de representación de un alto cargo del instituto. En la cuenta "Otros servicios" aparecían en el ejercicio 39.646 euros correspondientes a gastos por atenciones sociales y en la revisión sobre una muestra de estos gastos se detectó que en los expedientes administrativos no constaban "las facturas o recibos acreditativos" de los desembolsos. "No obstante", añade el informe de la Sindicatura, de la descripción del concepto de gasto que aparece en la contabilidad del instituto "cabe inferir que determinados gastos satisfechos con tarjeta de crédito [no se especifica quién era el titular], concretamente 6.794 euros, difícilmente pueden ser imputables a la actividad propia del instituto financiero". La Sindicatura concluye, por tanto, que deben de "regularizarse", es decir reintegrarse o justificarse documentalmente en qué se ha gastado y no sólo que se ha pagado.

La entidad sometió con posterioridad sus conclusiones al parecer del propio IVF, que presentó varias alegaciones a las conclusiones provisionales del informe de la Sindicatura. El IVF, que José Manuel Uncio dejó de dirigir en 2004 después de casi nueve años al frente, mostraba su desacuerdo con el borrador del informe de fiscalización "por su valoración subjetiva" y aludir a una situación "que no es del todo cierta".

"Debemos señalar", alegan los actuales responsables del banco público de la Generalitat, "que todos los gastos de la cuenta de atenciones sociales, tienen como soporte documental su correspondiente justificante de pago". El IVF argumenta que estos gastos son necesarios para la actividad de la institución financiera "y por tanto son gastos del ejercicio". Según la institución, es precisamente el concepto de "atenciones sociales" el que hace difícil que estos desembolsos no se consideren propios de la actividad del instituto.

El auditor encargado de responder a las alegaciones y elevar el borrador al consejo de la Sindicatura de Comptes responde al instituto que no constan las facturas o recibos que acreditan el gasto, "es decir los justificantes del gasto". O lo que es lo mismo, en el expediente sólo se adjuntan, como reconoce el IVF, los justificantes de pago de la tarjeta de crédito. Y así lo enfatiza en el documento final: "El Instituto se refiere a que dispone de los justificantes de pago, circunstancia ya conocida por esta Sindicatura, pero insuficiente". E insiste en que de la naturaleza de los gastos auditados resulta difícil concluir que son propios de la actividad que desarrolla el Instituto. El órgano auditor no ofrece más detalles sobre las compras o pagos, pero sí se ratifica en que se "regularice" el millón largo de antiguas pesetas.

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El Síndic de Comptes, Rafael Vicente Queralt, comparecerá la próxima semana ante la Comisión de Economía y Hacienda de las Cortes Valenciana para presentar las conclusiones del informe de 2003 y someterse a las preguntas de los grupos parlamentarios.

El ex director del Instituto Valenciano de Finanzas José Manuel Uncio, que tomó las riendas de esta institución de la mano del entonces presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, no respondió a las llamadas de este diario.

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