Un hombre mata a otro a navajazos en una disputa por una mujer

La declaración de una testigo permitió detener al supuesto agresor a las pocas horas

Los celos por una mujer fueron los desencadenantes de una reyerta que empezó con el intercambio de un cigarrillo y acabó con un homicidio. Ángel Ignacio Ollero, de 36 años, fue detenido el miércoles por la tarde por agentes de la comisaría de policía de Móstoles acusado de matar a navajazos a un vecino suyo, Manuel Machín, de 32 años. Machín murió a las pocas horas de ingresar en el servicio de urgencias del hospital Ernest Lluch de la localidad.

Los hechos se produjeron sobre las 15.30 del pasado miércoles en el parque Huerta, en el centro de Móstoles. A esas horas estaban Ángel Ignaci...

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Los celos por una mujer fueron los desencadenantes de una reyerta que empezó con el intercambio de un cigarrillo y acabó con un homicidio. Ángel Ignacio Ollero, de 36 años, fue detenido el miércoles por la tarde por agentes de la comisaría de policía de Móstoles acusado de matar a navajazos a un vecino suyo, Manuel Machín, de 32 años. Machín murió a las pocas horas de ingresar en el servicio de urgencias del hospital Ernest Lluch de la localidad.

Los hechos se produjeron sobre las 15.30 del pasado miércoles en el parque Huerta, en el centro de Móstoles. A esas horas estaban Ángel Ignacio Ollero y Manuel Machín sentados en un banco, cuando el segundo ofreció un cigarrillo a la compañera sentimental del primero, según las primeras investigaciones. Ésta se marchó, momento en el que empezó una discusión entre los dos hombres por los celos del primero.

Entonces, Ollero sacó una navaja y asestó cuatro puñaladas a su vecino. Las dos más graves le afectaron la parte alta del pecho y el espacio intercostal, lo que le produjo la pérdida de una gran cantidad de sangre. Las otras dos cuchilladas le alcanzaron una mano y una muñeca, ya que la víctima intentó defenderse de su atacante, según fuentes de la investigación.

La agresión se produjo detrás de un centro de salud que hay en un lateral del parque Huerta, una zona frecuentada por toxicómanos. La víctima fue conducida por otras personas que estaban en las inmediaciones de este ambulatorio, donde fue atendido de urgencia. Pero, al ver que era una agresión tan grave, solicitaron la presencia de una UVI móvil, que le trasladó al servicio de urgencias del hospital de la localidad. Allí ingresó consciente y orientado, pero al poco entró en parada cardiorrespiratoria. Pudo ser reanimado por los facultativos, pero murió poco después, sobre las siete de la tarde.

Al lugar de los hechos acudió un coche patrulla y otro camuflado. Los policías de paisano empezaron a preguntar a los viandantes que estaban por la zona. Una mujer dio la descripción física del agresor: alto, fuerte, desgarbado, con la tez muy morena y de unos 35 años. Además, le llamaban Nacho.

"Defensa propia"

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Los agentes dieron una vuelta por la zona y se toparon con una persona que respondía a las características físicas facilitadas por la testigo. Le pararon, le pidieron la documentación y le preguntaron qué había hecho con su amigo. "Sólo ha sido en defensa propia", admitió el hombre, que fue inmediatamente detenido. Junto con los policías, fue al lugar donde se produjo la reyerta para efectuar una inspección ocular. Ayer le estaban interrogando en la comisaría de Móstoles.

El detenido tiene varios antecedentes por delitos contra la propiedad (robos), agresión a su esposa (tiene pendiente una orden de alejamiento) y diversas reclamaciones, según informó la Jefatura Superior de Policía.

Éste es el cuarto homicidio que se registra en la región en lo que va de año.

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