REFERÉNDUM EUROPEO | Los resultados en Cataluña

ERC atribuye el peso del 'no' a la disconformidad con la Europa de los Estados

Carod dice que el resultado evidencia el auge del bloque de la "izquierda nacional"

Triunfó el en el referéndum sobre la Constitución europea, pero los 11 puntos más respecto al resto de España conseguidos por el no en Cataluña también fueron interpretados como una victoria por Esquerra Republicana (ERC), uno de los dos partidos que propugnaban el voto negativo en esta consulta. El líder de Esquerra, Josep Lluís Carod, señaló pasadas las 22.00 horas, cuando ya estaba escrutado cerca del 100% de los sufragios, que el 28% alcanzado por el no en Cataluña expresa una "disconformidad con la Europa de los Estados que ignora a Cataluña".

Josep Lluís Ca...

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Triunfó el en el referéndum sobre la Constitución europea, pero los 11 puntos más respecto al resto de España conseguidos por el no en Cataluña también fueron interpretados como una victoria por Esquerra Republicana (ERC), uno de los dos partidos que propugnaban el voto negativo en esta consulta. El líder de Esquerra, Josep Lluís Carod, señaló pasadas las 22.00 horas, cuando ya estaba escrutado cerca del 100% de los sufragios, que el 28% alcanzado por el no en Cataluña expresa una "disconformidad con la Europa de los Estados que ignora a Cataluña".

Josep Lluís Carod anunció que su partido se dispone a utilizar esta diferencia en las negociaciones con el Gobierno español. "Esto no acaba aquí", aseguró.

Los independentistas consideraron un elemento extraordinariamente positivo para ellos que el resultado del referéndum haya tenido datos significativamente distintos en Cataluña y en el conjunto de España. Esta diferencia de 11 puntos en el resultado indica, proclamó Carod, "un comportamiento electoral nacional, distintivo".

Sin embargo, ERC ha de compartir el 28% de votos negativos registrados ayer en Cataluña con Iniciativa Verds-Esquerra Unida (ICV-EUiA) y eso impidió a Carod cantar victoria para los independentistas. El líder republicano calificó este resultado de claro "avance" de la "izquierda nacional", formulación que contrapuso al "retroceso" del bloque de los "partidos tradicionales", el formado por el PSC, Convergència i Unió (CiU) y el Partido Popular (PP), que preconizaron el . En la batalla del referéndum también se ha confirmado, dijo, la tendencia al alza del bloque de los partidos "pequeños" (ERC e ICV) y un correlativo desgaste del bloque de los "grandes" (CiU y el PP), que "pierden fuelle" en cada cita con las urnas. En conjunto, dijo, el bloque de los partidos "grandes" solía lograr en Cataluña en torno al 80% de los votos en cada convocatoria, pero ahora ha obtenido sólo el 65%.

La interpretación en clave estrictamente nacionalista del resultado del referéndum realizada por Carod fue coherente con los argumentos defendidos durante la campaña previa a la consulta; pero ayer la utilizó también para advertir al Gobierno español de que "debe tener en cuenta este 28% de voto catalán, esta diferencia", en los próximos meses en las negociaciones políticas que se avecinan para la reforma del Estatut. "No aceptaremos cualquier estatuto", afirmó.

Carod realizó esta advertencia rodeado de los principales dirigentes del partido, con el conseller en cap del Gobierno de la Generalitat, Josep Bargalló, a su derecha, y el secretario general de Esquerra, Joan Puigcercós, detrás. En su intervención, que finalizó con un "¡viva Europa!" y un "¡viva Cataluña!", el presidente de ERC reconoció que el elevado nivel de abstención "no puede satisfacer a nadie" y advirtió de que el también elevado porcentaje de votos en blanco "es un toque de atención a una determinada manera de hacer política".

La lectura del resultado en clave estrictamente nacionalista muestra con claridad cuál era el objetivo de Esquerra en este referéndum: reforzar el espacio político del independentismo. Aunque la argumentación de la campaña desarrollada en las dos últimas semanas contenía también elementos relativos a aspectos sociales y económicos de la Constitución europea, el planteamiento general era estrictamente nacionalista. La idea más repetida y razonada era que la Constitución europea "ignora a Cataluña".

La abstención fue interpretada también a su favor. De la baja participación, del 41%, prácticamente igual en Cataluña y en el resto de España, Carod dedujo que "esta Europa, tal como se está construyendo, no interesa a los catalanes". También afirmó que el carácter consultivo del referéndum induce a la abstención.