El Barça admite que deberá limitar los fichajes el próximo curso

El Barcelona reconoció ayer que tendrá que echar el freno en su política de fichajes con vistas a la próxima temporada después de haberse gastado 56 millones de euros en nuevos jugadores durante este curso y un total de 100 millones en los dos últimos, bajo el mandato de Joan Laporta. El plan de negocio del club azulgrana, con el que la directiva logró hace poco más de un año un crédito y avales de 151 millones con ocho entidades financieras encabezadas por La Caixa, preveía una inversión de 35 millones para 2004-05.

"No habrá inversión masiva. Las perspectivas para la campaña que viene...

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El Barcelona reconoció ayer que tendrá que echar el freno en su política de fichajes con vistas a la próxima temporada después de haberse gastado 56 millones de euros en nuevos jugadores durante este curso y un total de 100 millones en los dos últimos, bajo el mandato de Joan Laporta. El plan de negocio del club azulgrana, con el que la directiva logró hace poco más de un año un crédito y avales de 151 millones con ocho entidades financieras encabezadas por La Caixa, preveía una inversión de 35 millones para 2004-05.

"No habrá inversión masiva. Las perspectivas para la campaña que viene son muy moderadas. Se invertirá menos", explicó Ferran Soriano, vicepresidente económico. Soriano admitió que, frente a la opción de "la austeridad total", la apuesta de la directiva entraña "algo más de riesgo", pero se mostró satisfecho con los fichajes realizados. El acuerdo con bancos y cajas, aseguró, permite al club actuar con "flexibilidad" en las inversiones.

"Los bancos no controlan ni aconsejan" al club, dijo Soriano. El acuerdo con ellos abría la vía a renegociar la abultada deuda, que ha pasado de 220 millones a 227. Pero la directiva da por hecho que al final del ejercicio se recortará, por primera vez, a 210.

Una de las salidas para no atar de pies y manos al equipo para fichar sería desprenderse de jugadores de su propiedad, como Riquelme o Saviola, cedidos al Villareal y el Mónaco respectivamente.

El Barça argumenta que podía acelerar su política de fichajes porque también se ha acelerado su plan de negocio. Precisamente ayer la directiva sacó pecho al valorar sus cuentas a mitad del ejercicio fiscal, que cierra en julio. La evolución de sus ingresos en el primer semestre, hasta diciembre, fue un 23% mejor que la del mismo periodo de 2003-04 (101,1 millones). Y, además, la previsión de ventas para todo el año fiscal asciende a 206 millones frente a los 191 inicialmente previstos.

Hasta diciembre, los gastos subieron un 20% (el año pasado se recortaron un 18%), pero el beneficio que el Barça logró por primera vez el año pasado se consolida. En seis meses ganó 5,4 millones y confía en alcanzar en julio los 13 millones.

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