Reportaje:

"Él también estaba en el campo"

Los canteranos replican a Roberto Carlos por culparles de la eliminación en la Copa

"Los no habituales deben tener más hambre", sentenció Roberto Carlos media hora después de la eliminación del Madrid en la Copa ante el Valladolid en el Bernabéu el pasado miércoles. Otra vez, el brasileño cargó contra sus compañeros, como ya hiciera en su día con Camacho o Casillas, por ejemplo. O, indirectamente, contra García Remón, que le dejó en el banquillo en Santander. Entonces, Roberto Carlos, renovado este año hasta 2007 por expreso deseo de Camacho, exigió al club romper el contrato.

Álvaro Arbeloa, como es joven, canterano, y juega poco, se sintió señalado por Roberto Carlos...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

"Los no habituales deben tener más hambre", sentenció Roberto Carlos media hora después de la eliminación del Madrid en la Copa ante el Valladolid en el Bernabéu el pasado miércoles. Otra vez, el brasileño cargó contra sus compañeros, como ya hiciera en su día con Camacho o Casillas, por ejemplo. O, indirectamente, contra García Remón, que le dejó en el banquillo en Santander. Entonces, Roberto Carlos, renovado este año hasta 2007 por expreso deseo de Camacho, exigió al club romper el contrato.

Álvaro Arbeloa, como es joven, canterano, y juega poco, se sintió señalado por Roberto Carlos: "Lo más fácil es echarnos el muerto, pero no es cierto", respondió ayer elevando el tono. Roberto Carlos, de 31 años y con ocho y medio de estancia en el vestuario blanco, pretoriano del nuevo técnico, Vanderlei Luxemburgo, señaló con el dedo acusador a los suplentes: "Hay que estar siempre motivados, la primera parte que hicimos no es propia de este equipo". Se lo puso fácil a Arbeloa: "Él también estuvo sobre el campo en el primer tiempo..." Arbeloa no es el único "no habitual" que se ha sentido molesto por el diagnóstico del veterano. Jurado, aunque más discreto, también expresó su disconformidad: "Yo salí con ganas, aunque cuesta porque estás muy responsabilizado". Para Jurado, "es lógico que se digan cosas malas cuando se pierde, aunque molesta".

César: "No deberíamos hacer comentarios sobre los demás compañeros"
Más información

Emilio Butragueño, vicepresidente del club, reconvino a Roberto Carlos, en Radio Marca, con su habitual discurso mesurado: "Hay que ser respetuosos, más tras una derrota", dijo el directivo, que negó la posibilidad sancionar al brasileño por sus palabras. Unas palabras "impropias de él", según Butragueño. Álex Pérez, el héroe de la confrontación contra el Leganés, niega que la "culpa" de las derrotas sea de los chicos del filial: "Ni mucho menos, la culpa de las derrotas, incluida la del Valladolid, es de todos". Sin embargo, Pérez apostilló: "No estoy de acuerdo con Roberto Carlos, pero no me siento molesto para nada".

No es el primer incendio que provoca la chispa de la lengua de Roberto Carlos en lo que va de año. Empezó por José Antonio Camacho, dimisionario entrenador del Madrid. "No es una cuestión de correr", dijo el brasileño. "De hecho, tenemos que correr menos", recalcó tras perder ante el Espanyol. Después, sobre lo limitado de sus subidas, Roberto Carlos fue tajante: "Preguntadle al entrenador". Más tarde achacó su falta de proyección a que "Solari no es Zidane". Un mes después, dijo que "estaba lesionado" y por eso participaba menos. Cuando el Madrid perdió contra el Barcelona recibió un gol tonto por un malentendido entre el lateral y Casillas. Roberto Carlos le echó la culpa al meta: "Me equivocó que me pidiera el balón".

Los jóvenes son malos. Los titulares son buenos. Los novatos juegan la Copa del Rey y el Madrid pierde por su culpa. Esa sentencia ha pasado de sensación a certeza. Pero, al menos cuantitativamente, no es cierta. En los últimos diez años el equipo blanco no ha ganado el trofeo copero. Y, sin embargo, la media de inexpertos en las eliminatorias en las que se fraguó el fracaso es de algo más de dos por partido. En esa lista se incluyen Raúl, Casillas, Dani o Víctor. Por ejemplo, en la más lamentable y abultada derrota copera, en 1999, ante el Valencia y por seis goles a cero, inexpertos sólo jugaron Rojas y Dorado. En la eliminación ante el Toledo, de Segunda B, en 2000, lo hicieron otros tres: Corrales, Rivera y Miñambres.

César, habitual en la Copa y sempiterno suplente de Casillas, cree que aunque "es innegable que hay partidos más atractivos que otros, todos se deben jugar con profesionalidad". Para César, la leyenda de la Copa es falsa: "Hemos llegado a dos de las últimas tres finales". Sobre las declaraciones de Roberto Carlos se limita a dar un consejo: "No deberíamos hacer comentarios respecto de los otros compañeros, no hay que faltarse al respeto".

Miñambres, cedido en el Espanyol, también es un experto en las críticas colectivas "a los no habituales". Ha estado en tres partidos de Copa frustrados. Debutó en aquel tan célebre en el que el Madrid cayó ante el Toledo, en 2000, y disputó los dos encuentros de hace dos años contra el Mallorca. "Se pierde con los galácticos y con los suplentes, pero es muy fácil echar la culpa a los suplentes, aunque pierdan más los galácticos", razona. "Si Roberto Carlos se pusiera el vídeo del partido contra el Valladolid tendría algo que callar", agrega Miñambres.

Roberto Carlos intenta arrebatar el balón a Moré, que es acosado por Gravesen.ULY MARTÍN

Archivado En