Ronaldo está seco

Vida ordenada y dieta equilibrada. Ésas fueron las buenas noticias que viajaron con Ronaldo desde Brasil el pasado verano. Pero ya el jugador, medio en broma medio en serio, planteaba la duda a este periódico sobre si su cambio de hábitos no trastocaría su pegada en el campo: "Estoy mucho más fino, más delgado y más centrado... lo mismo meto muchos menos goles que la temporada pasada". Por el momento, sus palabras, más que un comentario gracioso, parecen una profecía: ha marcado tres goles en diez partidos de Liga, cinco menos que la temporada pasada a estas alturas. Remata menos que nunca: 29...

Vida ordenada y dieta equilibrada. Ésas fueron las buenas noticias que viajaron con Ronaldo desde Brasil el pasado verano. Pero ya el jugador, medio en broma medio en serio, planteaba la duda a este periódico sobre si su cambio de hábitos no trastocaría su pegada en el campo: "Estoy mucho más fino, más delgado y más centrado... lo mismo meto muchos menos goles que la temporada pasada". Por el momento, sus palabras, más que un comentario gracioso, parecen una profecía: ha marcado tres goles en diez partidos de Liga, cinco menos que la temporada pasada a estas alturas. Remata menos que nunca: 29 veces en 13 encuentros entre Liga y Champions. Unas cifras que suponen algo más de dos disparos por partido. El año pasado, en el campeonato doméstico, Ronaldo marcaba una de cuatro veces que lo intentaba. Este año se queda en una de cada seis.

El goleador lleva los mismos tantos que el inglés Owen en la Liga. Pero con una diferencia: mientras que el pequeño británico sólo necesita 143 minutos para celebrar un gol, Ronaldo precisa de más tiempo, 252. De hecho, el ariete ha jugado 756 minutos en nueve de los diez partidos que se llevan disputados, todos como titular. Owen ha jugado los mismos partidos, nueve, pero sólo ha salido cuatro veces desde el inicio y suma un total de 429 minutos. En la Liga de Campeones, Ronaldo aún no se ha estrenado en cuatro partidos y tan sólo ha tirado a puerta en nueve ocasiones. El año pasado marcó cuatro veces en nueve partidos, consiguiendo anotar una de cada cinco veces que lo intentaba.

"No está teniendo suerte por ahora. Lleva pocos goles, pero luego meterá uno y vendrán todos los demás de golpe. Es demasiado goleador como para estar tanto tiempo sin marcar". El diagnóstico es de Iván Helguera. Sin embargo, Ronaldo se estrenó en la Liga en la primera jornada ante el Mallorca, precisamente a pase de Owen. Después, marcó en la jornada séptima frente al Betis y en la novena frente al Getafe. No parece que le hayan servido esos tantos como trampolín para iniciar una de las famosas "rachas" de los goleadores.

El problema de Ronaldo no es el problema de Ronaldo. Es el problema del Madrid. El conjunto blanco, que el curso pasado por estas fechas había marcado 23 goles, es ahora el séptimo que menos marca de todo el campeonato con 10 goles, a uno por partido. El Barcelona, por ejemplo, lleva el doble, 20. Pero también le superan equipos como el Betis, con 12, o el Osasuna, con 11. Por no hablar del Levante (15), el Valencia (17) o el Zaragoza (18). Desglosados los diez goles blancos, ningún delantero, con la excepción de Owen, sale muy bien parado: los cuatro tantos que no se reparten el inglés y Ronaldo los han marcado Beckham, de falta (2), Figo, de penalti (1) y Raúl.

El equipo dirigido por García Remón, sin embargo, es segundo en la tabla tras el Barcelona, aunque a siete puntos. Una situación a la que ha contribuido la escasez de goles encajados, cinco. Una cifra que le sitúa como el conjunto menos goleado junto al propio Barça, el Espanyol y el Villarreal.

Por si le sirve de consuelo a Ronaldo, su compatriota Romario, ha sentenciado: "Es el mejor delantero del mundo ahora mismo".