'These Words' convierte a Natasha Bedingfield en la artista del momento
El álbum 'Unwritten' ha arrasado en las listas de ventas británicas
Natasha Bedingfield, con sólo 22 años, se ha convertido en una de las estrellas del momento merced a una canción, These Words, que suena con insistencia en las emisoras de media Europa. Su estribillo quedón, que repite efusivamente, "I love you, I love you, I love you" ("Te quiero..."), es también un gran éxito en España y el anticipo de un deslumbrante disco de debú, Unwritten, que se pone a la venta mañana.
En Inglaterra ha sido número 1 de ventas nada más publicarse, hazaña difícil para la ópera prima de una mujer y que sólo antes había conseguido, según afirma l...
Natasha Bedingfield, con sólo 22 años, se ha convertido en una de las estrellas del momento merced a una canción, These Words, que suena con insistencia en las emisoras de media Europa. Su estribillo quedón, que repite efusivamente, "I love you, I love you, I love you" ("Te quiero..."), es también un gran éxito en España y el anticipo de un deslumbrante disco de debú, Unwritten, que se pone a la venta mañana.
En Inglaterra ha sido número 1 de ventas nada más publicarse, hazaña difícil para la ópera prima de una mujer y que sólo antes había conseguido, según afirma la publicidad, la cantante Annie Lennox tras dejar Eurythmics y lanzarse en solitario.
El éxito le ha proporcionado a Natasha Bedingfield una súbita fama, pero también un cambio de vida radical que se ha podido escenificar en las tres intensas y maratonianas jornadas que la artista ha pasado en España. El miércoles y jueves pasado recorrió buen número de emisoras de radio y platós de TV radicados en Madrid, y el viernes posó en tierras almerienses para un reportaje fotográfico en exclusiva para una revista norteamericana de la que ni su compañía discográfica española logró sonsacarle el nombre. "Todo merece la pena cuando salgo a un escenario y oigo a tanta gente cantando mis canciones", dice la artista. "La fama es muy incómoda, es cierto, y te cambia mucho la vida. Ya no puedo ver a mi gente como antes, y para quedar con mis amigos tengo que citarlos no sin consultar con mi agenda".
A pesar del giro que ha dado su vida cotidiana, Natasha Bedingfield ve con muy buenos ojos todo lo que le está pasando: "Estoy viviendo un sueño que llevaba mucho tiempo deseando. Ahora me parece increíble vivirlo".
En su biografía se cuenta que empezó a componer con tan sólo 12 años, tarea en la que siempre se sintió arropada por sus hermanos mayores, Daniel y Nikola, que habían formado un grupo.