"Para poder volar, lo más importante es tener bien puesta la cabeza"
Antonio Romero (Jaén, 1953) es parapentista y director de organización de una de las pruebas puntuables para el Campeonato de España de Parapente que, por primera vez, se está celebrando en el paraje Siete Pilillas de Pegalajar (Jaén). Desde el pasado lunes y hasta mañana sábado, cerca de 150 deportistas procedentes de España y otros países compiten y realizan vuelos de exhibición por el cielo de Sierra Mágina.
Pregunta. ¿Ha sido complicado poder organizar una prueba del campeonato nacional?
Respuesta. Aunque es la primera vez que participamos en el Campeonato de Es...
Antonio Romero (Jaén, 1953) es parapentista y director de organización de una de las pruebas puntuables para el Campeonato de España de Parapente que, por primera vez, se está celebrando en el paraje Siete Pilillas de Pegalajar (Jaén). Desde el pasado lunes y hasta mañana sábado, cerca de 150 deportistas procedentes de España y otros países compiten y realizan vuelos de exhibición por el cielo de Sierra Mágina.
Pregunta. ¿Ha sido complicado poder organizar una prueba del campeonato nacional?
Respuesta. Aunque es la primera vez que participamos en el Campeonato de España, el club del Centro de vuelo de Pegalajar lleva desde 1988 organizando vuelos de exhibición y concentraciones en las Siete Pilillas. También hemos organizado pruebas para los campeonatos de la Liga Andaluza y Nacional con gran participación y éxito, sobre todo, porque el paraje reúne unas buenas condiciones y es de fácil acceso.
P. El parapente se considera deporte de riesgo, ¿realmente es tan peligroso?
R. Es más la imagen que tiene que el peligro que entraña. Más de una vez nos han tildado de locos, pero si se tiene un buen equipo y se respetan las normas y todas las indicaciones que se aprenden en las escuelas, cualquiera puede volar.
P. ¿No es necesario tener unas características físicas concretas?
R. No, para volar lo más importante es saber usar la cabeza, ser responsable, conocer el terreno y saber interpretar unos conocimientos mínimos sobre la meteorología. Con tres o cuatro fines de semanas en un centro de aprendizaje, uno ya puede volar, aunque nunca solo, que está prohibido. También es necesario sacarse una licencia para ello.
P. ¿Es un deporte caro?
R. El curso de aprendizaje puede costar cerca de 600 euros, y un buen equipo algo más de 3.000.
P. ¿Cuántas escuelas hay en Andalucía?
R. Reconocidas, cuatro. Una de ellas está en Granada y la dirige Ramón Morillas, campeón mundial de paramotor, y parapentista que también está participando en las pruebas de Pegalajar.
P. En vuelo libre sin motor, ¿qué distancia se puede recorrer?
R. Desde las Siete Pilillas tenemos una prueba de 100 kilómetros en una media de cuatro horas.
P. ¿Qué se siente al volar?
R. Después de 20 años aún no he encontrado palabras que puedan describirlo. Podríamos hablar de relajación y libertad, y de un paisaje a vista de pájaro, imposible de describir. Hay que vivirlo.
P. ¿Qué otras zonas destaca para poder volar en Andalucía?
R. Los Algodonales, en Cádiz, y Loja y Ceres de la Vega, en Granada.