Quique Álvarez descubre el gol
El central marca por segunda vez consecutiva y el Villarreal vence al Murcia
A su elegancia a la hora de defender, el capitán Quique Álvarez ha añadido una vocación ofensiva inusual hasta la fecha. El central ha marcado dos goles en sendas jornadas consecutivas. El conseguido ayer, culminando una triangulación perfecta, bastó para tumbar a un cándido Murcia al que, tras el consumado descenso de la semana pasada, parece que le resbala todo.
El Villarreal, en cambio, mantiene todavía opciones de clasificarse para la Copa de la UEFA. Más aún tras la victoria obtenida ayer ante el Murcia sin mucho esfuerzo, a la que hay que sumar los resultados de otros campos, que ...
A su elegancia a la hora de defender, el capitán Quique Álvarez ha añadido una vocación ofensiva inusual hasta la fecha. El central ha marcado dos goles en sendas jornadas consecutivas. El conseguido ayer, culminando una triangulación perfecta, bastó para tumbar a un cándido Murcia al que, tras el consumado descenso de la semana pasada, parece que le resbala todo.
El Villarreal, en cambio, mantiene todavía opciones de clasificarse para la Copa de la UEFA. Más aún tras la victoria obtenida ayer ante el Murcia sin mucho esfuerzo, a la que hay que sumar los resultados de otros campos, que le beneficiaron. Pero su cabeza está en la presente edición del torneo europeo y, por ello, Paquito dio descanso ayer a seis de sus jugadores titulares, que el pasado jueves disputaron el encuentro ante el Valencia.
VILLARREAL 1 - MURCIA 0
Villarreal: Reina; Belletti, Quique Álvarez, Ballesteros, Arruabarrena; Senna, Battaglia; Martí (Anderson, m. 69), Guayre (Riquelme, m. 83), Calleja (Roger, m. 60); y Víctor.
Murcia: Sánchez Broto; Maciel (Juanma, m. 62), Cuadrado, Hurtado, Azkárate (Tato, m. 71); Acciari, Clavero; Luis García, Richi, Míchel (Julio Álvarez, m. 76); y Juárez.
Goles: 1-0. M. 68. Quique Álvarez culmina una jugada elaborada por Senna y Guayre.
Árbitro: Losantos Omar. Amonestó a Battaglia y Guayre.
Unos 11.000 espectadores en el estadio de El Madrigal.
Tras muchos meses lesionado, el zurdo Calleja tuvo su oportunidad, así como el delantero Guayre, la promesa estancada, que oyó del público cierta silbatina reprobatoria ante sus loables y, en ocasiones, torpes intentos. Todos buscaban a Víctor, autor de las mejores acciones ante el portero Sánchez Broto, ex del Villarreal. Pero fue el central Quique Álvarez quien abrió el cerrojo mediado el segundo acto. Y el Murcia, al igual que en la mayor parte del campeonato, se fue sin decir nada.