LAURA LAFORGA BAJÓN / La mujer de los niños
Maestra psicopedagoga de 28 años y prima carnal del ex portavoz del Gobierno Miguel Ángel Rodríguez, Laura Laforga Bajón tenía un futuro prometedor por delante. Hacía poco que había cambiado de trabajo, pensaba mudarse de piso, era tía desde hacía seis meses y acariciaba la posibilidad de encontrarse pronto con su novio, Ángel, con quien salía desde los 16. Su amiga Laura Rodríguez, prima de su novio, recuerda que habló con ella el martes y quedaron para ver un piso al que pensaban mudarse a partir del 1 de abril. "Estaba muy cerca de la estación madrileña de Príncipe Pío y a las dos nos venía...
Maestra psicopedagoga de 28 años y prima carnal del ex portavoz del Gobierno Miguel Ángel Rodríguez, Laura Laforga Bajón tenía un futuro prometedor por delante. Hacía poco que había cambiado de trabajo, pensaba mudarse de piso, era tía desde hacía seis meses y acariciaba la posibilidad de encontrarse pronto con su novio, Ángel, con quien salía desde los 16. Su amiga Laura Rodríguez, prima de su novio, recuerda que habló con ella el martes y quedaron para ver un piso al que pensaban mudarse a partir del 1 de abril. "Estaba muy cerca de la estación madrileña de Príncipe Pío y a las dos nos venía muy bien para ir al trabajo", dice. Así recuerda Laura a su amiga, con quien debería haber empezado a compartir casa de alquiler dentro de tres semanas porque el lugar donde vivía la joven asesinada estaba muy lejos de su trabajo. Cogió el tren en San Fernando de Henares y aún no se sabe qué bomba la mató.
Cuando las dos amigas, vallisoletanas de nacimiento, hablaron el martes, Laura estaba "muy emocionada por la casa nueva, ya que se evitaría utilizar la línea de cercanías donde encontró la muerte". Hasta ese momento había compartido piso en San Fernando de Henares con dos amigas, desde donde iba cada día a un colegio de Vallecas a dar clases de español a adolescentes inmigrantes.
El trabajo parecía bastante prometedor y "aunque los chavales a los que enseñaba tenían entre 15 y 16 años ella siempre hablaba de 'sus niños', como cuando estaba en la guardería de Coslada". Todos hablan de ella como de una persona "muy cariñosa" y enamorada de su trabajo. Tras estudiar Magisterio en Valladolid, hizo Psicopedagogía en Salamanca, donde coincidió con Laura Rodríguez, que define a su amiga como "buena gente; muy buena gente". Luego se le humedecen los ojos.-