"El Gobierno ha madurado de golpe con esta crisis"

Joan Puigcercós (Ripoll, 1966), hijo de una familia obrera del textil, ha sido la figura clave en Esquerra Republicana (ERC) en las negociaciones para formar el Gobierno

catalán. Habla directo y sin complejos.

Pregunta. ¿Contento con el Gobierno?

Respuesta. Hombre, deje que pasen los 100 días...

P. Bueno, pero algo habrá visto...

R. Veo cosas que me gustan, como la decisión de igualar el trato de las familias monoparentales con las numerosas, la de racionalizar el gasto para no vivir instalados en el crédito, la de reforzar las...

Joan Puigcercós (Ripoll, 1966), hijo de una familia obrera del textil, ha sido la figura clave en Esquerra Republicana (ERC) en las negociaciones para formar el Gobierno

catalán. Habla directo y sin complejos.

Pregunta. ¿Contento con el Gobierno?

Respuesta. Hombre, deje que pasen los 100 días...

P. Bueno, pero algo habrá visto...

R. Veo cosas que me gustan, como la decisión de igualar el trato de las familias monoparentales con las numerosas, la de racionalizar el gasto para no vivir instalados en el crédito, la de reforzar las plantillas de profesores con 1.500 maestros y la redefinición de los consejos comarcales. También me gusta cómo se encarrila la política territorial. Creo que en 60 días este Gobierno cogerá la velocidad de crucero.

Esquerra ha tomado una decisión y no va a especular sobre un cambio de mayorías

El error fue que Carod no estaba en la misma situación que cuando se entrevistó con Otegi

P. En estas semanas mucha gente ha tenido la sensación de que ERC consideraba como propia una parte del Gobierno y veía el resto como ajeno.

R. Se tiende a departamentos homogéneos, con equipos muy cohesionados, del mismo partido. Y luego a coordinarlos muy bien.

P. Con independencia de otros aspectos de este asunto, la entrevista del ex conseller en cap Josep Lluís Carod con ETA en Francia dio también toda la impresión de que Esquerra iba por su lado.

R. Eso no tiene nada que ver con el Gobierno. Carod había iniciado hace dos años con una entrevista con Otegi, el líder de Batasuna, una vía que consideraba útil para acabar con la violencia de ETA. La conversación de ahora perseguía la misma finalidad. Hay que enmarcarla en este contexto, en el que Carod no actuaba como un responsable de la Generalitat, sino de partido.

P. Así pues, ¿no hubo error?

R. Creo que el error es no haber sopesado que Carod ya no estaba en la misma situación que cuando se entrevistó con Otegi. Y que no es lo mismo un responsable político como Otegi, aunque haya quien no quiera verle como tal, que los interlocutores de ahora. Eran otra cosa. Pero no creo que eso signifique que en este Gobierno cada partido tenga una actitud propia. Más bien creo que con esta crisis, este Gobierno ha madurado de golpe.

P. ¿Y qué ha aprendido?

R. Que nada le será fácil. Que habrá un asedio permanente del PP. La experiencia de las Baleares nos servirá para que este Gobierno catalán dure más de cuatro años. Creo que como mínimo durará ocho años. El anterior Gobierno balear fue sometido a un asedio brutal, pero también el de Aragón y el de Andalucía. Todos los que discrepan del PP lo sufren. En cambio, es curioso que haya dos que no tienen estos problemas: los de Bono y Rodríguez Ibarra. Se entienden perfectamente con el PP.

P. ¿De dónde cree que viene esa situación?

R. El PP quería un pacto CiU-Esquerra. Quería reproducir en Cataluña el esquema que tantos réditos le ha dado en el País Vasco: una división entre nacionalistas y no nacionalistas. Al PP no le interesa en Cataluña una situación basada en las coordenadas derecha-izquierda, porque poco tiene que hacer en ella. En cambio, con el otro esquema creía que tendría una brecha para penetrar en la sociedad catalana.

P. ¿Cree que ERC sigue teniendo la doble llave para formar mayorías tanto con la izquierda como con CIU?

R. Esquerra no va a especular y pensar que en cualquier momento pueda cambiar las mayorías. Hemos contraído un compromiso estratégico y es, por lo menos, para cuatro años. Quiero que quede claro. ERC no está especulando ni regateando. No mercadeamos.

P. CiU se lo ha tomado fatal con ustedes.

R. En CiU hay en estos momentos una gran desorientación. Vive una situación muy compleja. Ha de mantener su frontera electoral con el PP, lo que le cuesta mucho, porque en los últimos años su política ha sido muy acrítica y sumisa. Y por el otro lado, en la frontera catalanista hay un voto muy pragmático que optará seguramente por ERC en estas elecciones, a las que CiU va por vez primera desde la oposición.

P. ¿Se han roto los puentes con CiU?

R. Durante este periodo de crisis se ha hablado con el sector nacionalista de CiU, no con Duran Lleida. Y yo estoy convencido de que al sector nacionalista de CiU le interesa estar cuatro años en la oposición. Saben que la única posibilidad de regenerar CiU es desde la oposición.

P. ¿Por qué?

R. Es la única forma de forzar una renovación ya no sólo generacional, sino de personas. Tanto en Unió como en Convergència.

P. Pero ellos ya han sustituido a Pujol por Artur Mas

R. Sí, pero les queda todavía una tropa que no es un problema de edad. Los Duran, Sánchez Llibre, Silva, etcétera. Y, en Convergència, figuras como Homs, la familia, etcétera. Si ese partido no tiene acceso a las concesiones de la Administración, dejará de interesar a los sectores que en estos momentos obstaculizan una catarsis en Convergència.

P. ¿Regresará Carod al Gobierno catalán?

R. Pasado el ciclo electoral, ERC ha de decidir quién ha de ocupar este cargo, que le corresponde según el acuerdo de gobierno.

P. ¿Será ERC la que decida quién es el conseller en cap?

R. Es un Gobierno de coalición. ERC decidirá de la misma forma que Unió designaba a sus miembros en los gobiernos de CiU. Obviamente, a nadie se le escapa que tendremos que hablar con los socios del Gobierno y que la última palabra la tiene el presidente. Veremos después de las elecciones.