Reportaje:

Finidi busca quien le quiera

El nigeriano, rescatado por Luis, se entrena con el Mallorca para intentar volver a jugartras seis meses parado y pensando en la retirada

En nigeriano, su nombre significa "un futuro lleno de sol". Pero Finidi George (Puthovcourt, Nigeria; 15 de abril de 1971) ha visto últimamente algún que otro nubarrón sobre su carrera. Después de su gris paso por el Ipswich Town, inglés, y de estar seis meses en Sevilla sin equipo, el ex jugador del Ajax, el Betis y el Mallorca había decidido dejar el fútbol si en diciembre o enero no recibía una oferta. Eso hasta que la semana pasada una llamada telefónica abrió un claro en su futuro. Era Luis Aragonés, su entrenador durante dos temporadas en el Betis y otra en el Mallorca. "Quería saber mi ...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

En nigeriano, su nombre significa "un futuro lleno de sol". Pero Finidi George (Puthovcourt, Nigeria; 15 de abril de 1971) ha visto últimamente algún que otro nubarrón sobre su carrera. Después de su gris paso por el Ipswich Town, inglés, y de estar seis meses en Sevilla sin equipo, el ex jugador del Ajax, el Betis y el Mallorca había decidido dejar el fútbol si en diciembre o enero no recibía una oferta. Eso hasta que la semana pasada una llamada telefónica abrió un claro en su futuro. Era Luis Aragonés, su entrenador durante dos temporadas en el Betis y otra en el Mallorca. "Quería saber mi situación. Le dije que no tenía nada y, de momento, me ofreció volver a entrenarme con el Mallorca", afirma el futbolista.

"No quiero engañar a nadie. Si no estoy bien, lo dejo. Aunque no sé qué haría sin el fútbol"

Así que Finidi hizo la maleta y este lunes comenzó a preparar en la isla su regreso. No podrá hacerlo, si recupera la forma física, hasta que se abra el mercado de invierno. Y el club que preside Mateo Alemany tendrá que solucionar antes otro detalle. Cuenta ya con cuatro extracomunitarios: Eto'o, camerunés; Ligüera, uruguayo; Stankovic, yugoslavo, y Nené, brasileño. Finidi no dispone del pasaporte comunitario pese a tener un hijo de ocho meses, Kevin, nacido en Palma. Su compañera, María, es mallorquina, pero no están casados.

Por ahora, el nigeriano sólo se ejercita en solitario con el Mallorca. Sin ficha ni contrato. Se prueba. Hace una doble sesión, mañana y tarde, de lunes a sábado. Ejercicios aeróbicos, de resistencia, carreras de 50 metros... "Me voy a poner bien y los técnicos decidirán. Estoy cogiendo el ritmo. Durante estos seis meses he corrido, pero no es lo mismo. Iba un día sí y otro no. Así no se coge la forma", reconoce Finidi.

"No ha tenido ningún control ni asesoramiento. Es como estar sin pretemporada, pero multiplicado por tres", explica su preparador, Toni Servera. El club ha diseñado un plan de recuperación para las próximas seis semanas. En la última debería incorporarse ya al grupo.

Al regreso de Finidi ayuda su hambre de fútbol y su portentoso físico, el de un jugador de piernas largas que en su apogeo físico corría los 100 metros en menos de 11 segundos. "Tiene un físico muy bueno, el de un atleta. Asimilará muy bien el trabajo", añade Servera. "No quiero engañar a nadie. Si no estoy bien, no volveré. Pero me encanta jugar. Pensé que ya no iba a poder hacerlo más, que lo dejaba. Aunque no sé qué habría hecho sin el fútbol. No me veo en un banquillo, por ejemplo", dice Finidi.

Luis ha sido su salvador. "Me conoce, confía en mí y yo en él. Siempre he dado el 100% con él. Cada vez que entro, lucho para ganar", cuenta el jugador. "Es un gran profesional, esperemos que vuelva", advierte el técnico.

Finidi desea hacer del Mallorca la última parada de una carrera prolífica. Comenzó a jugar en los campos de tierra de su barrio, en Puthovcourt, junto a su hermano mayor, que jugaría después en la Liga nigeriana. Tras su paso por equipos regionales y semiprofesionales como el Shark Ports, el Harcourt y el Calabar Rovers, llegó al Ajax en 1993 en el inicio de su trienio triunfal. En Ámsterdam ganó las Ligas de 1994, 1995 y 1996 y la Copa de Europa y la Intercontinental en 1995 a las órdenes de Louis van Gaal y con Davids, Seedorf, los hermanos De Boer, Overmars y Kluivert.

También ganó la Copa de África de 1994 con Nigeria, con la que ha sido 34 veces internacional y ha jugado dos Copas del Mundo, en 1994 y 1998.

La Gacela fichó por el Betis en 1996 por seis millones de euros y, ataviado con un sombrero cordobés para celebrar los goles, se ganó el cariño de la grada. Tras cuatro temporadas, 132 partidos y 37 tantos, fichó por el Mallorca en 2000 para marcharse al curso siguiente al Ipswich por otros seis millones.

En Portmand Road vivió su peor etapa. "Para triunfar yo, tenía que jugar bien el equipo y no hicimos nada. Es muy difícil jugar en un conjunto que no funciona", se lamenta Finidi.

Este verano recibió ofertas de Qatar. "Pero no me daban el dinero que quería", dice. Se quedó sin equipo, sin nadie que le quisiera. Hasta que Luis le llamó.

SCIAMMARELLA

Sobre la firma

Archivado En