Reportaje:CULTURA Y ESPECTÁCULOS

VOCES DE MUJERES, PROTAGONISTAS DEL FINAL DE PIRINEOS SUR

El festival de músicas del mundo cerró su XII edición con un espectáculo dedicado a la memoria de la cantante antillana Edith Lefel, en el que participó la aragonesa Carmen Paris, y una noche de rai con la incombustible Cheikha Rimitti.

El proyecto Voz de Mujer se planteó como homenaje a la recientemente fallecida Edith Lefel, una de las mejores voces de las Antillas francesas. El pasado verano la cantante estuvo unos días disfrutando de Pirineos Sur como espectadora y en enero un fallo cardiaco se la llevó sin haber cumplido los cuarenta. El que fue su compañero, el periodista Daniel Brown, leyó un texto al principio de la noche. "Pirineos Sur comparte muchos valores caros con Edith: la defensa de los derechos musicales, de su identidad y de sus culturas".

Carmen Paris le dio el colorido local a Voz de Mujer. "Hago es...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El proyecto Voz de Mujer se planteó como homenaje a la recientemente fallecida Edith Lefel, una de las mejores voces de las Antillas francesas. El pasado verano la cantante estuvo unos días disfrutando de Pirineos Sur como espectadora y en enero un fallo cardiaco se la llevó sin haber cumplido los cuarenta. El que fue su compañero, el periodista Daniel Brown, leyó un texto al principio de la noche. "Pirineos Sur comparte muchos valores caros con Edith: la defensa de los derechos musicales, de su identidad y de sus culturas".

Carmen Paris le dio el colorido local a Voz de Mujer. "Hago esto porque puedo, quiero y me da la gana", dijo la maña. Tiene mucho mérito lo que esta mujer se ha inventado con la jota. Hay voces políticas y periodísticas de Aragón que andan reclamando mayor presencia de la música aragonesa en Pirineos Sur. Por pedir que no quede, pero quizá habría que reivindicar espacios para lo autóctono sin necesidad de alterar un festival que se mueve por otros derroteros y que no pide certificado de origen.

La verdad es que no acabó de cuajar la noche. A Raphaëlle Eva le costó entrar en calor, las chicas de Maxxie sobraban y en sólo dos temas poco pudo mostrar la camerunesa Princess Erika. Tanya Saint-Val le puso clase al proyecto con una canción tradicional de la isla Guadalupe. Un desperdicio traer a una cantante de su categoría para tan poco rato. Si se trataba de dejar al respetable con ganas de volver a verla en un futuro muy cercano, efecto conseguido.

La noche anterior estuvo dedicada al rai con los conciertos de Cheb Kader y Cheikha Rimitti. Kader, de 36 años, ha vuelto a escena tras años de silencio con un rai impregnado de influencias latinas, pero ni por un instante pudo con los 76 años de Rimitti. Brazos en jarra, la abuela del rai, con esa garganta áspera y rocosa macerada en tabernas argelinas, se desenvuelve con gran comodidad entre jóvenes que parecen haberse pasado el día oyendo rock.

Desde el 11 de julio y hasta el sábado, el Auditorio de Lanuza -los conciertos del fin de semana con llenos de hasta 5.000 espectadores- y la carpa de Sallent de Gállego -entre semana para las propuestas más minoritarias- han acogido a Youssou N'Dour, Oscar D'León o DJ Dolores. El número de espectadores de pago alcanza este año los 30.000.

Cuando empezó el festival Pirineos Sur, la frontera con Francia, a menos de 10 kilómetros de distancia, se cerraba todos los días a las diez de la noche. Fue preciso que el gobernador civil negociase con el prefecto para mantenerla abierta durante el fin de semana y permitir así la llegada de franceses al festival de Valle de Tena -al menos un 10% de los asistentes de la actual edición han acudido desde Pau y localidades cercanas-. Hoy, en el alto del Portalet, no hay ni rastro de guardias civiles, gendarmes o funcionarios de aduanas. Por ahora, la música también circula libremente. Además, Pirineos Sur y La Mar de Músicas compartirán el año próximo un par de proyectos. Una iniciativa que demuestra que los dos festivales más importantes de músicas del mundo que se celebran en España no sólo no compiten sino que suman esfuerzos para ofrecer producciones inesperadas.

Cheikha Rimitti, el viernes en Pirineos Sur.

Archivado En