FÚTBOL | Liga de Campeones

Dos Copas por la borda en una semana

Tan sólo en siete días el Deportivo se ha quedado apeado en dos competiciones: de la Copa del Rey, en Mallorca el pasado miércoles, y de la Copa de Europa, ayer en Turín. Porque tras su derrota ante el Juventus y el sorprendente empate del Basilea en Old Trafford ante un Manchester United ya clasificado como primero de grupo y que jugó repleto de suplentes, no hay carambola posible que ayude al Deportivo. En caso de triple empate -con una derrota del Juventus en Suiza y una victoria gallega-, el Juventus sería el beneficiado. Eso sí, siempre que no pierda por cuatro goles de diferencia, ya que...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Tan sólo en siete días el Deportivo se ha quedado apeado en dos competiciones: de la Copa del Rey, en Mallorca el pasado miércoles, y de la Copa de Europa, ayer en Turín. Porque tras su derrota ante el Juventus y el sorprendente empate del Basilea en Old Trafford ante un Manchester United ya clasificado como primero de grupo y que jugó repleto de suplentes, no hay carambola posible que ayude al Deportivo. En caso de triple empate -con una derrota del Juventus en Suiza y una victoria gallega-, el Juventus sería el beneficiado. Eso sí, siempre que no pierda por cuatro goles de diferencia, ya que en Turín, el equipo de Marcello Lippi ganó por 4-0 al Basilea.

En definitiva, el Deportivo-Manchester United de la próxima semana en Riazor será un calvario para la muchachada de Irureta, pese a lo atractivo del cartel. Así, al Deportivo sólo le resta la Liga, en la que está tercero, a sólo tres puntos del Real Madrid.

La derrota en Turín se produjo en día que comenzó con una excelente noticia para el deportivismo. Por primera vez desde su grave enfermedad, un cáncer testicular, Molina estuvo en un banquillo. Irureta le convocó como portero suplente y los hinchas italianos le acogieron con una gigantesca pancarta de ánimo: "Hasta pronto, Molina". El presidente de la peña más radical del Juventus le entregó incluso una placa recordatoria.

La alegría de Molina se truncó en el último instante, con el gol del croata Tudor cuando agonizaba el partido. El empate que ya mascaba el Deportivo le hubiera dejado vivo de cara a la última jornada.

Sobre la firma