Connery hace honor a la leyenda escocesa

El actor Sean Connery dejó claro su origen escocés en una reciente visita a Nueva York, cuando otorgó una rácana propina al conductor que durante ocho horas le dio paseos en un automóvil de lujo por la Gran Manzana. Según informaba el diario británico The Times, el intérprete de las primeras películas de James Bond, y de filmes como La roca o El nombre de la rosa, le dio tan sólo cinco dólares de propina a su chófer particular, después de su largo paseo en coche por Nueva York. "No, gracias", fue la airada respuesta del conductor, Paul Monroe, al que otros ac...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El actor Sean Connery dejó claro su origen escocés en una reciente visita a Nueva York, cuando otorgó una rácana propina al conductor que durante ocho horas le dio paseos en un automóvil de lujo por la Gran Manzana. Según informaba el diario británico The Times, el intérprete de las primeras películas de James Bond, y de filmes como La roca o El nombre de la rosa, le dio tan sólo cinco dólares de propina a su chófer particular, después de su largo paseo en coche por Nueva York. "No, gracias", fue la airada respuesta del conductor, Paul Monroe, al que otros actores como los estadounidenses Tom Cruise, Cameron Díaz o Steven Seagal remuneraron con más generosidad. Monroe explicó que "le llevé por todo Nueva York durante casi ocho horas, pensé que estaba buscando piso, y por todo un día de trabajo me ofreció el equivalente a tres libras". "Le dije que Bond se puede quedar con sus cinco pavos", afirmó el enfadado chófer. En Estados Unidos se acostumbra a remunerar servicios en hoteles y restaurantes con una propina de entre el 15% y el 20% del coste total, lo que seguro que hubiera sobrepasado los escasos cinco dólares con los que se rascó el bolsillo Connery. El actor, nacido en Fountainbridge (Escocia) hace 72 años y ganador de un Oscar, es conocido, además de por su buena labor interpretativa, por su tacañería, y en más de una ocasión ha dejado boquiabiertos a sus compañeros de reparto por su escaso deseo de compartir sus elevados emolumentos. A pesar de ello, recientemente una encuesta señaló que es la persona con la que más británicos se tomarían una pinta en un pub. "¿Es que no saben que seguramente tendrían que pagar ellos?", concluía el diario británico.-

Más información

Archivado En