Freire, condenado al exilio

El campeón mundial seguirá en el extranjero tras romperse la negociación con el iBanesto.com

Óscar Freire, el campeón del mundo, seguirá condenado al exilio. Después de que las negociaciones que mantenía desde hace un mes con el iBanesto.com se rompieran este fin de semana, el ciclista cántabro aceptará hoy, con casi toda probabilidad la oferta, llegada la semana pasada, del equipo holandés Rabobank, un conjunto especializado en clásicas, aunque no desdeña las grandes vueltas, uno de los grandes del pelotón mundial.

'Hemos hecho todo lo posible pero finalmente Freire ha buscado la seguridad y unas mejores condiciones se ha decantado por una oferta de dos años', dijo José Miguel...

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Óscar Freire, el campeón del mundo, seguirá condenado al exilio. Después de que las negociaciones que mantenía desde hace un mes con el iBanesto.com se rompieran este fin de semana, el ciclista cántabro aceptará hoy, con casi toda probabilidad la oferta, llegada la semana pasada, del equipo holandés Rabobank, un conjunto especializado en clásicas, aunque no desdeña las grandes vueltas, uno de los grandes del pelotón mundial.

'Hemos hecho todo lo posible pero finalmente Freire ha buscado la seguridad y unas mejores condiciones se ha decantado por una oferta de dos años', dijo José Miguel Echávarri, director del iBanesto.com, quien apunta: 'Nosotros sólo le podíamos ofrecer un año'. Banesto sólo ha garantizado el patrocinio del equipo hasta diciembre de 2003. En el bando de Freire, cuyo representante es su hermano, se mantenía ayer la sensación de que el equipo bancario no había agotado todas las posibilidades.

La ruptura significa el fracaso de la gran operación rescate. Se frustra así la última posibilidad de que uno de los cracks del ciclismo mundial regresara a España; una ocasión increíble para que el campeón cántabro impulsara la cultura de las clásicas, un territorio que en muchos países es más importante aún que el del Tour el Giro o la Vuelta. El iBanesto.com, que busca reforzarse después de una temporada en que ha brillado en las vueltas pequeñas (ha ganado siete) pero no tanto en las grandes (pese a los cuatro triunfos en la Vuelta), podría intentar ahora el fichaje de Aitor González, aunque fuentes próximas a la negociación ya ubican al ganador de la Vuelta en la órbita del equipo belga Quick-Step.

Con un cuarto de cabeza puesto en la interminable novela de su contratación (desde julio Freire atiende ofertas) y otro cuarto en las molestias que de vez en cuando le crea su rodilla derecha, Freire encaró ayer uno de los dos domingos de octubre en los que tantas esperanzas ha depositado.

El primer domingo era el de la París-Tours, la penúltima prueba de la Copa del Mundo, la carrera que se decía de los sprinters y en la que el año pasado acabó segundo tras el fugado Virenque. Pero, un año más, y van seis seguidos, el ganador no se decidió en un sprint masivo. Hubo una fuga temprana de cinco (entre ellos, Paco Mancebo, del iBanesto.com) desde el kilómetro cinco y dos -el francés Jacky Durand y el danés Jacob Piil- llegaron destacados a la avenida de Grammont. Ganó Piil, de 29 años.

Cuando Freire empezó a lanzar el sprint a rueda del australiano McEwen, un bandazo del pelotón le dejó cerrado. Levantó el pie y fue undécimo. Mejor que él entraron otros dos españoles, José Enrique Gutiérrez (6º) e Igor Astarloa (7º). Éste, en la prueba que peor le iba, sumó los puntos necesarios para mantenerse tercero en la general de la Copa del Mundo y soñar aún con ganarla: está a 99 puntos del primero, el italiano Paolo Bettini. Queda una prueba, el Giro de Lombardía, que otorga 100 puntos al primero. Nada es imposible.

El segundo domingo, el más importante, será el próximo, el día 13, será el del campeonato del mundo. Puede ser un día histórico en el circuito de Zolder (Bélgica): Freire, a quien no le va nada mal el trazado, todo llano, pueda ganar su tercer Mundial, gesta sólo lograda por Alfredo Binda (en los años 30), Rik van Steenbergen (años 50) y Eddy Merckx (años 70).

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