Crónica:Campeonatos de Europa al aire libre | ATLETISMO

Lamela en longitud y Pestano en disco destacan como favoritos

Yago Lamela se sacudió algunos de los fantasmas que le rondaban desde los Juegos Olímpicos de Sydney. Fue allí donde se encontró ante su primera gran decepción. No se clasificó para la final. Venía de ganar la medalla de plata en los Mundiales de 1999, su año mágico, la temporada que le convirtió en la gran noticia del deporte español. Pero el atleta que había saltado 8,56 metros no despegó en Sydney. Con unos decepcionantes 7,89 metros quedó eliminado en la prueba de calificación.

Regresó a España entre dudas y problemas, el inicio de un calvario que afectó a la gente que le había llev...

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Yago Lamela se sacudió algunos de los fantasmas que le rondaban desde los Juegos Olímpicos de Sydney. Fue allí donde se encontró ante su primera gran decepción. No se clasificó para la final. Venía de ganar la medalla de plata en los Mundiales de 1999, su año mágico, la temporada que le convirtió en la gran noticia del deporte español. Pero el atleta que había saltado 8,56 metros no despegó en Sydney. Con unos decepcionantes 7,89 metros quedó eliminado en la prueba de calificación.

Regresó a España entre dudas y problemas, el inicio de un calvario que afectó a la gente que le había llevado desde niño. Rompió con su entrenador, Juan José Azpeitia, y se trasladó a Madrid para ponerse bajo la tutela de Juan Carlos Álvarez. Algo no funcionó: su temporada fue pésima y abandonó a Álvarez. Su nuevo destino era Valencia, donde reside Rafael Blanquer antigua estrella de la longitud y entrenador de moda. No se sabe cuál es el estado real de Lamela, pero al menos logró enfrentarse con éxito al desafío de la gran competición. Fue el único que pasó los ocho metros (8,03), lo que no habla precisamente bien del nivel de una especialidad que atraviesa un período de sequía.

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Lamela necesita de este tipo de empujones anímicos. Aunque fue segundo en los Europeos de pista cubierta, en Viena, su temporada de verano se ha desarrollado entre altibajos, como si todavía no tuviera el grado de confianza de los viejos tiempos. Desde luego, está lejos del arrollador atleta que cautivó a España en 1999, pero comienza a dar señales positivas. Por el contrario, Raúl Fernández, campeón de Europa en pista cubierta, pasó graves dificultades para clasificarse. Lo hizo por puestos, con un mejor salto de 7,87 metros, lejos de sus prestaciones habituales.

A Mario Pestano le viene ahora un trabajo inesperado. Parece mentira que un lanzador español de disco figure entre los favoritos a la victoria en un gran campeonato. Es su caso, y más después de su tremenda exhibición en la serie de calificación. En su primer intento alcanzó una distancia de 65,27 metros, la mejor marca de todos los participantes, entre los que se encontraban fenómenos como el lituano Virgilius Alekna, el húngaro Robert Fazekas o el ruso Dimitri Shevchenko.

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