Las 'revistas del corazón', entre la boda de Jesulín y la reacción de Belén Esteban

La megaexclusiva de la boda de Jesulín y María José Campanario se la ha llevado, como estaba previsto, la revista ¡Hola!. Un total de 37 páginas para explicarnos el acontecimiento del verano. Y hay que decir que con Jesulín vuelve el hombre, el hombre de antes, porque sus declaraciones no tienen desperdicio: 'Mi mujer me pone de comer, mi mujer hace su casa, mi mujer cuida de los críos, me cuida a mí y, después, que haga lo que quiera, pero dentro de una lógica'. María José no va a parar la pobre, pero bueno, también hay mujeres a las que les gustan los hombres-hombres. Mientras, las ot...

La megaexclusiva de la boda de Jesulín y María José Campanario se la ha llevado, como estaba previsto, la revista ¡Hola!. Un total de 37 páginas para explicarnos el acontecimiento del verano. Y hay que decir que con Jesulín vuelve el hombre, el hombre de antes, porque sus declaraciones no tienen desperdicio: 'Mi mujer me pone de comer, mi mujer hace su casa, mi mujer cuida de los críos, me cuida a mí y, después, que haga lo que quiera, pero dentro de una lógica'. María José no va a parar la pobre, pero bueno, también hay mujeres a las que les gustan los hombres-hombres. Mientras, las otras revistas, sin nada que llevarse a la boca sobre la ceremonia, acuden a la otra, a Belén Esteban, la madre de la hija del torero (que, por cierto, no sale en ninguna de las fotografías por acuerdo previo entre los padres). Belén mantiene el tipo: les desea que sean felices, pero... no ve a Jesulín tan contento, le ve triste... Dice que el torero es buen padre, pero... no se implica en la educación de su hija. Genio y figura. Y cambiando de culebrón, tenemos a Rocío y a Fidel retozando en la playa; a Mar Flores disfrutando de su matrimonio y de su yate, y a muchos famosos más pasándolo cañón en la costa, como Andrés Pajares y Conchi en Lecturas. Agosto no ha hecho más que empezar y falta poco más de un mes parar la boda de Ana Aznar y Alejandro Agag. La cosa promete.