'No somos manipulados'
La comisión gestora de la UPO justificó ayer su decisión de impedir la entrada de miembros de la red de apoyo en el recinto universitario por su 'constante labor de obstrucción' a la búsqueda de soluciones a la protesta. 'Más bien parecen perseguir una confrontación general con las autoridades políticas sobre el problema de la inmigración', señalan en una nota. Por esta razón, la comisión gestora ha trasladado a la Fiscalía de Sevilla la actuación de la red de apoyo 'por si pudiera ser constitutiva de un delito contra los trabajadores y contra los derechos de los ciudadanos extranjeros'.
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La comisión gestora de la UPO justificó ayer su decisión de impedir la entrada de miembros de la red de apoyo en el recinto universitario por su 'constante labor de obstrucción' a la búsqueda de soluciones a la protesta. 'Más bien parecen perseguir una confrontación general con las autoridades políticas sobre el problema de la inmigración', señalan en una nota. Por esta razón, la comisión gestora ha trasladado a la Fiscalía de Sevilla la actuación de la red de apoyo 'por si pudiera ser constitutiva de un delito contra los trabajadores y contra los derechos de los ciudadanos extranjeros'.
El portavoz de los encerrados, Dichou Rabah, negó ayer que hubieran solicitado la expulsión de miembros de la red de apoyo el jueves, pero también se desmarcó de la influencia del grupo: 'No somos responsables de las declaraciones de la gente que está fuera del encierro y no son inmigrantes'.
Rabah aseguró que los encerrados 'no somos manipulados', en respuesta a numerosas organizaciones y representantes políticos que han criticado la utilización de los inmigrantes para otros fines políticos. Juan Carrique, uno de los integrantes de la red de apoyo, acusó el jueves a los responsables académicos de tener una actitud 'intimidatoria' y 'dictatorial' al prohibir la entrada en el campus de los miembros de la red, informa Europa Press.