Antes de entrar dejen salir

Al fútbol español le sobran futbolistas: hasta 64, a día de hoy. La mayoría de los equipos de Primera se han encontrado con un problema al que, de momento, pocos saben dar solución: tienen excedente de futbolistas. En algunos casos, de forma exagerada. Deshacerse de una decena de jugadores en las próximas fechas es el reto de varios clubes. Si no, además, no podrán fichar. La excepción la protagoniza el Atlético, convertido en el equipo más voraz del verano. El mercado, así, con un par de excepciones -el citado Atlético y el Recreativo- apenas se mueve, algo inusual a estas alturas del año per...

Al fútbol español le sobran futbolistas: hasta 64, a día de hoy. La mayoría de los equipos de Primera se han encontrado con un problema al que, de momento, pocos saben dar solución: tienen excedente de futbolistas. En algunos casos, de forma exagerada. Deshacerse de una decena de jugadores en las próximas fechas es el reto de varios clubes. Si no, además, no podrán fichar. La excepción la protagoniza el Atlético, convertido en el equipo más voraz del verano. El mercado, así, con un par de excepciones -el citado Atlético y el Recreativo- apenas se mueve, algo inusual a estas alturas del año pero que también ocurre en el resto de las grandes Ligas europeas.

Pocos compran, pocos venden, los cedidos vuelven a su lugar de origen y ayudan a que el excedente de jugadores crezca. El Atlético, por ejemplo, ha fichado ya a seis futbolistas (Coloccini, Sergi, Albertini, Emerson, Javi Moreno y José Mari), ha visto cómo regresaban siete que estaban cedidos (Hernández, Njegus, Cubillo, Lardín, Lawal, Paunovic, Gaspar y Zahínos) y sólo se ha desprendido de cinco (Toni, Antonio López, Jesús, Luque y Diego Alonso). Resultado: a día de hoy, en su plantilla conviven 37 jugadores y sólo hay sitio para 25, que ése es el número de fichas permitido para cada equipo. Siete de esos 37 futbolistas ocupan plaza de extranjero (Hibic, Juan Gómez, Emerson, Stankovic, Lawal, Njegus y Paunovic) por lo que sobran al menos tres.

El regreso de los cedidos provoca que la mayoría de los clubes tengan excedente de personal

El club de Jesús Gil cuenta con 37 jugadores, el Deportivo con 34 y el Real Madrid con 32

Pero no es necesario fichar con profusión para que se produzca un atasco en el vestuario. Ahí está el Madrid, que aún no ha contratado a nadie y ya tiene a 32 jugadores en nómina. A la decisión del club blanco de incorporar definitivamente a la primera plantilla a tres jóvenes del filial (Miñambres, Raúl Bravo y Portillo) se ha unido el regreso de seis jugadores que estaban cedidos: Julio César, Dorado, Cambiasso, Julio Álvarez, Fernando y Tote. Completa la lista Congo, que se ha pasado un año en blanco y sin ficha. Y en su misma situación podría estar Baljic si no llega a ser porque el Madrid ha decidido regalarle. El Galatasaray turco, donde ha recalado el jugador bosnio, no ha pagado ni un euro al conjunto blanco. El Madrid ha renunciado a recuperar ni uno solo de los 3.000 millones de pesetas (más de 18 millones de euros) que hace tres años pagara Lorenzo Sanz por quien se ha convertido en el fichaje menos rentable de la historia madridista. La baja de Karanka, anunciada hace tiempo, tampoco ha permitido al Madrid ingresar dinero alguno. Se fue al Athletic con la carta de libertad en la mano.

La situación que vive el Deportivo se viene repitiendo verano tras verano. El equipo coruñés cuenta a día de hoy con 34 futbolistas, y ese número podría aumentar gracias al Toro Acuña, que se convertiría, en caso de fichar por el conjunto gallego -que sigue negociando con el Zaragoza- en el traspaso más caro de lo que se lleva de verano. Diez millones de euros recibiría el Zaragoza, amén de la cesión del ex atlético Jesús y de David Pirri. El Depor, de momento, no ha hecho más fichaje que el del citado Jesús, que le serviría como moneda de cambio, y ha visto cómo regresaban a casa hasta ocho futbolistas que tenía cedidos, repartidos por medio mundo, entre ellos el Turu Flores, que ha tenido un paso fugaz por el Valladolid, y el Loco Abreu, que ha abandonado el Cruz Azul mexicano.

Repartió jugadores el Betis aquí y allá la pasada temporada y ahora le vuelven todos de golpe. Es el caso de los cedidos Fabao, Arzu, Gálvez o el argentino Romero, todos con contrato en vigor, que regresan a la espera de que Lopera les encuentre acomodo en algún equipo si Víctor Fernández no cuenta con ellos.

A diferencia del Atlético, el Recreativo, el otro club que se ha hartado de fichar (hasta 10 jugadores nuevos tiene en su plantilla) no tiene problemas de excedente, más que nada porque también se ha hartado de despedir futbolistas -11 bajas tiene-, por lo que ahora mismo sólo cuenta con 26 jugadores.

Hace un año, a estas alturas, el Barça había contratado ya a cinco futbolistas, a los que poco después se añadiría Saviola. Hoy sólo ha fichado a uno (el portero alemán Enke) y ha recuperado a Luis García, que estaba cedido en el Valladolid. A la espera de que se sepa si Van Gaal sube a algún chaval del filial, el club azulgrana sólo cuenta con 22 jugadores, menos que ningún otro conjunto de la categoría, tras dar la baja a Sergi, Abelardo, Reina, Coco, Alfonso y Dutruel.

Abelardo (Alavés), Karanka (Athletic), Assunçao (Betis) o Belletti (Villarreal). Esos son, descontando los del Atlético, los únicos fichajes de cierto renombre que se han producido en una pretemporada sin apenas movimientos, dominada por las cesiones o por el regreso de los cedidos.

La cercanía del Mundial y el hecho de que sólo un fichaje haya provocado lo que se conoce como efecto dominó -el de Emerson, que llegó al Atlético procedente del Deportivo y éste se llevó a Jesús para utilizarlo como moneda de cambio en la posible contratación de Acuña- son las razones esgrimidas por varios representantes para explicar este parón en el habitualmente ajetreado mercado veraniago, amén de la crisis económica, que de momento ha impedido que se produjeran fichajes tan espectaculares como los de Zidane y Saviola hace apenas un año.

Pero los problemas monetarios no sólo azotan al fútbol español. En Italia el movimiento está siendo aún menor. De hecho, sólo dos contrataciones han atraído la atención de los medios: la de Seedorf, que ha dejado el Inter para marcharse al Milan en una operación que le ha costado al equipo de Berlusconi unos 20 millones de euros, y la de Guardiola por la Roma, procedente del Brescia, aunque en este caso no ha tenido que producirse pago alguno. El calcio estudia la posibilidad de reducir el número de fichas por equipo y, como ya se hizo en España, dejarlo en 25. Todo ello para intentar frenar una crisis galopante, que a principios de la pasada temporada anunciaba un endeudamiento de los clubes cercano a los 720 millones de euros que no ha hecho sino crecer.

En Inglaterra, donde la crisis es menor, lo más llamativo hasta ahora ha sido el regreso de Juninho a Middelsborough. Y en Alemania, todos los movimientos del mercado se han producido en la órbita del Bayern Múnich, que hace meses fichó a Ballack y Zé Roberto, ambos del Leverkusen, lo que ha provocado que este equipo intente evitar que se le marchen Lucio o Schneider, precisamente lo contrario de lo que, a pocos días de que todos empiecen a trabajar, quieren los clubes españoles: que se vayan jugadores, que se cumpla aquello de 'antes de entrar dejen salir'.