Wilmots: 'El árbitro me reconoció su error'
Peter Prendergast era el nombre más repetido ayer en los vestuarios del estadio de Kobe por la expedición belga, atónita por su decisión de anular el gol de cabeza de Wilmots con el marcador a cero.
Robert Waseige, el seleccionador, se mostró muy crítico con la indicación de este jamaicano que se ha pasado buena parte de su carrera pitando a Surinam, Trinidad y Tobago, Cuba y las Antillas Holandesas. 'Seguramente todos los espectadores se habrán sorprendido tanto como nosotros', afirmó. Un ingenuo. En el estadio, nadie, salvo un grupito de seguidores de su equipo, se dio por enterado...
Peter Prendergast era el nombre más repetido ayer en los vestuarios del estadio de Kobe por la expedición belga, atónita por su decisión de anular el gol de cabeza de Wilmots con el marcador a cero.
Robert Waseige, el seleccionador, se mostró muy crítico con la indicación de este jamaicano que se ha pasado buena parte de su carrera pitando a Surinam, Trinidad y Tobago, Cuba y las Antillas Holandesas. 'Seguramente todos los espectadores se habrán sorprendido tanto como nosotros', afirmó. Un ingenuo. En el estadio, nadie, salvo un grupito de seguidores de su equipo, se dio por enterado. Brasil jugaba como en casa, con todas las gradas cautivadas.
Wilmots, el autor del tanto, también se lamentó: 'Me han anulado el gol sin razón alguna, como se habrá visto por televisión. Pero está claro que los grandes equipos tienen habitualmente la suerte de cara, como también le ha ocurrido a Brasil con el gol de Rivaldo, desviado por un defensa nuestro'.
Un tanto que, según Waseige, marcó la diferencia entre su equipo -'un conjunto con una mirada colectiva importante'- y Brasil, 'con jugadores con mucho talento individual'.
Wilmots declaró a la televisión belga que el árbitro se dirigió a él en pleno partido para decirle que no hubo falta y pedirle excusas: 'Me reconoció su error'.
Los brasileños salieron en defensa de Prendergast, el jamaicano. Roque Junior, el defensa al que Wilmots ganó el salto, aseguró que el capitán belga le había desequilibrado en el aire 'con un codazo'. Si hubo codazo, sólo él lo sintió porque lo único evidente fue su cara de susto cuando vio que el balón embocaba en la red.
La polémica se añade a la suscitada en el partido Brasil-Turquía. Los brasileños, que ganaron por 2-1, se beneficiaron del arbitraje del surcoreano Kim Young Joo, que les dio un penalti inexistente y expulsó a un turco injustamente.