GENTE

MODA POR UNA CAUSA JUSTA

Alvarado convirtió el tradicional polo de Lacoste en unos calzoncillos con el cocodrilo en la bragueta; Montesinos le bordó unos claveles; Maitena se lo imaginó con una manga, devorada por el cocodrilo emblema de la firma francesa; Nacho Duato le puso un cuello de falsos diamantes; Antonio Carmona le añadió unas chorreras; Roger Salas lo convirtió en un tutú romántico; Ouka Lele pintó un paisaje donde el cocodrilo nadaba en un lago; Amaya Arzuaga le dio un tratamiento de alta costura; Ángel Schlesser lo transformó en una de sus sobrias ca...

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Alvarado convirtió el tradicional polo de Lacoste en unos calzoncillos con el cocodrilo en la bragueta; Montesinos le bordó unos claveles; Maitena se lo imaginó con una manga, devorada por el cocodrilo emblema de la firma francesa; Nacho Duato le puso un cuello de falsos diamantes; Antonio Carmona le añadió unas chorreras; Roger Salas lo convirtió en un tutú romántico; Ouka Lele pintó un paisaje donde el cocodrilo nadaba en un lago; Amaya Arzuaga le dio un tratamiento de alta costura; Ángel Schlesser lo transformó en una de sus sobrias camisas, y David Delfín, en un atravedido palabra de honor, pero fue Guinovart, que manchó con pintura un polo intacto, quien consiguió la puja más alta -2.000 euros pagados por una galería de arte- del público que acudió la noche del miércoles, en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, a la exposición-subasta de más de 60 polos manipulados por personajes relevantes del mundo de la cultura. No se trataba de una competición, sino de colaborar con una causa justa. En ese sentido se manifestaron la mayor parte de los artistas que acudieron a la subasta, como Lluís Juste de Nin o Juan Duyos. La tarifa de salida para la subasta era de 212 euros y el dinero recaudado será destinado a construir una casa de acogida para niñas recogidas en la calle en la India.-

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