Mas desautoriza al líder de CDC que dejó libertad para ir a los actos antiglobalización

El secretario general de Convergència Democràtica (CDC) y conseller en cap del Gobierno catalán, Artur Mas, se mostró ayer inflexible con los militantes de su partido que quieren dejar la puerta abierta a participar en los actos de los grupos antiglobalización ante la cumbre europea que albergará Barcelona la próxima semana. Mas no tuvo ningún reparo en desautorizar al líder de la formación en Barcelona, Joaquim Forn, un hombre de su máxima confianza, quien ayer mismo dio 'libertad absoluta' a los militantes del partido para participar en las manifestaciones. 'No estamos de acuerdo en p...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El secretario general de Convergència Democràtica (CDC) y conseller en cap del Gobierno catalán, Artur Mas, se mostró ayer inflexible con los militantes de su partido que quieren dejar la puerta abierta a participar en los actos de los grupos antiglobalización ante la cumbre europea que albergará Barcelona la próxima semana. Mas no tuvo ningún reparo en desautorizar al líder de la formación en Barcelona, Joaquim Forn, un hombre de su máxima confianza, quien ayer mismo dio 'libertad absoluta' a los militantes del partido para participar en las manifestaciones. 'No estamos de acuerdo en participar en estas manifestaciones', subrayó Mas, quien añadió tajante: 'Cualquier persona que pueda alterar esta postura no representa al partido'.

La advertencia de Mas se dirigía también a las juventudes de CDC, que han autorizado expresamente a sus afiliados a manifestarse contra la globalización, en contra del criterio expresado por el presidente de la Generalitat y líder del partido, Jordi Pujol. El pasado lunes, éste puso el grito en el cielo, en una conferencia en la que también participó el presidente del Gobierno, José María Aznar, precisamente porque los socialistas catalanes habían dado libertad a sus militantes para manifestarse. Los socialistas forman parte del Fòrum Social de Barcelona, una de las plataformas críticas con el actual proceso de globalización.

Mas quiso subrayar que la posición de Convergència i Unió (CiU) al respecto es 'muy clara'. La federación nacionalista, dijo, se opone a las protestas convocadas por los grupos antiglobalización porque 'pueden derivar en no se sabe qué escenario'. 'Además', prosiguió, 'se hacen cuando en Barcelona se convoca una cumbre europea en la que creemos, porque estamos construyendo una Europa que garantiza progreso y bienestar, aunque se pueden mejorar muchas cosas'.

Clos pide civismo

Por su parte, el alcalde de Barcelona, el socialista Joan Clos, pidió ayer a las entidades que han organizado actividades y manifestaciones críticas con la cumbre que preserven 'el nivel de civismo que haga posible la libertad de expresión', informa Efe. El alcalde hizo esta petición en el transcurso de una reunión que celebró en el palacete Albéniz con los cónsules de los países miembros de la Unión Europea (UE) y de los estados que aspiran a formar parte de ella.

Clos mostró su confianza en que durante estos días en la ciudad 'dominará el ambiente cívico en la manifestación tranquila y serena de las ideas'. El alcalde destacó que la cumbre de la Unión Europea 'tendrá la máxima relevancia' y se felicitó de que el lugar escogido para su celebración haya sido precisamente Barcelona. Asimismo hizo hincapié en que la cumbre tratará también de la política mediterránea orientada hacia el Magreb y los países del Sur.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO