La gota malaya del Barcelona

Las lesiones de Rivaldo empiezan a ser una gota malaya para el Barcelona. En plena escalada -hace cuatro jornadas llegó a caer hasta el noveno puesto-, el equipo azulgrana encara hoy (21.30, televisiones autonómicas y La 2) sin él a un Valencia que ha trazado una línea vertiginosa desde la octava posición hasta el liderato. Justamente en el gran momento de la Liga y en vísperas de devolver la visita europea al Roma, la musculatura del brasileño vuelve a crujir.

La reiteración de los contratiempos físicos de Rivaldo esta temporada refuerza las tesis que auguraban que, antes o después, ib...

Las lesiones de Rivaldo empiezan a ser una gota malaya para el Barcelona. En plena escalada -hace cuatro jornadas llegó a caer hasta el noveno puesto-, el equipo azulgrana encara hoy (21.30, televisiones autonómicas y La 2) sin él a un Valencia que ha trazado una línea vertiginosa desde la octava posición hasta el liderato. Justamente en el gran momento de la Liga y en vísperas de devolver la visita europea al Roma, la musculatura del brasileño vuelve a crujir.

La reiteración de los contratiempos físicos de Rivaldo esta temporada refuerza las tesis que auguraban que, antes o después, iba a pasarle factura el estresante ritmo de competición con el que ha apechugado. No ha parado en las cinco campañas y media que lleva en España, con el agravante de sus constantes viajes, muchas veces transoceánicos. A sus 29 años, parece evidente que empieza a acusar tanto partido y trasiego.

Ayer se confirmó que Rivaldo sufre una elongación en el recto anterior de la pierna derecha. El médico del club, Ricard Pruna, explicó que, ya durante el encuentro con el Roma, notó un cansancio sospechoso en su pierna de apoyo. No recibió ningún golpe ni sintió ningún desgarro muscular, pero percibió síntomas que le llevaron a renunciar al lanzamiento de una falta.

El delantero suramericano volvió a notar el jueves una fatiga preocupante en la misma pierna. Tras las pruebas médicas, se le ha detectado una pequeña lesión muscular. Pruna asegura que el contratiempo no es grave, pero advierte de que podría complicarse en el caso de que derivase en una ruptura muscular. Ello supondría una convalecencia de dos meses. Así que, para evitar males mayores, se decidió excluirle del viaje a Valencia. Rivaldo necesita descansar. El domingo se le efectuarán nuevas pruebas para dirimir si está en condiciones de jugar el próximo martes en Italia en la Liga de Campeones.

Ésta es la tercera lesión de Rivaldo en este curso. Ello, unido a sus ausencias debidas a los compromisos con la selección de su país, causa que se haya perdido ya 14 de los 40 partidos oficiales que ha disputado el Barcelona. Curiosamente, uno de los que se perdió fue el que le enfrentó en la primera vuelta liguera al Valencia en el Camp Nou y que acabó con empate a dos tantos.

Siendo importante, la ausencia de Rivaldo no supedita tanto el esquema táctico del Barcelona como la utilización del medio centro. Viene siendo éste el punto que más polémica ha concitado durante los últimos días. Ante el Deportivo pareció dar resultado la fórmula de una línea media más robustecida, en detrimento de la presencia en el equipo de Xavi. Sin embargo, ante el Roma sucedió todo lo contrario. El juego azulgrana mejoró cuando volvió Xavi y se hizo más intenso el juego por las bandas con la entrada del holandés Overmars.

De la utilización de esta fórmula el mayor damnificado sería Saviola, que podría volver al banquillo, especialmente en los partidos en terreno ajeno. Eso es precisamente lo que puede suceder en Mestalla a pesar incluso del hueco que deja Rivaldo. Kluivert, en un momento excepcional y que firmó cuatro goles en Tenerife, el del triunfo ante el Depor y el del empate frente al Roma, puede ser el único vestigio del tridente. Luis Enrique y Overmars podrían ser quienes ocuparan los puestos de Rivaldo y Saviola.