Promesas en saco roto

'La palabra de Teófila Martínez equivale a cero', sentenció ayer el presidente de la Diputación de Cádiz, el socialista Rafael Román, uno de los muchos altavoces del malestar extendido en la sociedad gaditana por la continuidad de la autopista A-4, que une Sevilla y Cádiz, como vía de peaje. El ministro de Fomento, Francisco Álvarez Cascos, afirmó el lunes que no habrá 'ni un solo euro' para recatar ninguna autopista nacional. Tres días más tarde, el secretario de Estado de Infraestructuras, Benigno Blanco, espetó en Cádiz, ante el silencio de Martínez: 'El rescate no es lo que necesita ahora ...

'La palabra de Teófila Martínez equivale a cero', sentenció ayer el presidente de la Diputación de Cádiz, el socialista Rafael Román, uno de los muchos altavoces del malestar extendido en la sociedad gaditana por la continuidad de la autopista A-4, que une Sevilla y Cádiz, como vía de peaje. El ministro de Fomento, Francisco Álvarez Cascos, afirmó el lunes que no habrá 'ni un solo euro' para recatar ninguna autopista nacional. Tres días más tarde, el secretario de Estado de Infraestructuras, Benigno Blanco, espetó en Cádiz, ante el silencio de Martínez: 'El rescate no es lo que necesita ahora España, porque todo el dinero irá a nuevas infraestructuras'. Estos mensajes han terminado por enterrar la promesa de la presidenta del PP andaluz, quien en las pasadas elecciones autonómicas aseguró, hasta en siete ocasiones, que el Consejo de Ministros liberalizaría el peaje. Luego prometió que rescataría el tramo Jerez-Puerto Real. Pasaron las elecciones y ni una ni otra cosa. Al mismo tiempo, el Gobierno liberó cuatro tramos de autopistas catalanas y previamente había hecho lo propio al transferir la autopista Bilbao-Behobia al gobierno vasco.

Con todo, la dirigente popular ha intentado esquivar la evidencia y el desánimo del gaditano con reiterados mensajes en los que combinaba dos ideas: una; 'el PP no cierra ninguna puerta y seguirá trabajando en la liberalización progresiva', y la otra: 'el PSOE tiene la culpa histórica'. Sus declaraciones no le han privado de las críticas.

'Impuesto revolucionario'

Los sindicatos acusan al Gobierno de practicar 'la asfixia total' contra Cádiz, mientras que los empresarios han abandonado su discurso escurridizo para acusar al Ejecutivo popular de imponer a los gaditanos 'un impuesto revolucionario' que 'ahoga y limita su desarrollo económico'.

Ante una propuesta del PA sobre la autopista, la reacción de la alcaldesa de Cádiz en el pleno municipal celebrado el viernes dejó boquiabiertos a todos. Ante la sorpresa generalizada, Teófila Martínez propuso que la Junta rescate el peaje y que el próximo presidente andaluz se comprometa a liberar el tramo Jerez-Cádiz. Esta propuesta se contradice con la posición que adoptó la alcaldesa hace dos años, cuando 'se mofó', según el PSOE, de una oferta del presidente de la Junta, Manuel Caves, para que el Gobierno andaluz y el Ministerio de Fomento rescatasen conjuntamente el peaje de manera inmediata.

El entonces ministro del ramo, Rafael Arias Salgado, hizo esperar a Chaves cinco meses para decir que se trataba de una propuesta 'poco seria, demagógica y electoralista'. Martínez apuntilló: 'Es competencia del Estado'. Ahora, la dirigente popular apuesta porque la Junta asuma el rescate.

'Es una sinvergüenza política, una mentirosa y una cínica, y además llega tarde porque es una solución que presentó en su día Manuel Chaves y ellos rechazaron', lamentó ayer el delegado de la Junta en Cádiz, José Antonio Gómez Periñán. El PA acusó a Martínez de 'caer en la paranoia y de insultar la inteligencia de los gaditanos'.

Así las cosas, el último atisbo de esperanza, según el PSOE, recae sobre el recurso que interpuso la Diputación de Cádiz ante el Supremo contra el Ministerio de Fomento por prorrogar, en 1997, a la empresa Aurea (antigua Aumar) la concesión del peaje 13 años más, desde el 2006 hasta el 2019. 'Una prórroga ilegal bajo el que subyace el enriquecimiento ilícito de esta firma', reiteró Román.