La Cartuja logra la final de la Copa de la UEFA en 2003 y el Bernabéu pierde la de la Champions

El estadio de La Cartuja, de Sevilla, acogerá en 2003 la final de la Copa de la UEFA, un evento al que también aspiraban otros campos, entre ellos el Villa Park, de Birmingham (Inglaterra), o el Saint Denis, de París (Francia). Su elección fue anunciada ayer por el presidente del máximo organismo futbolístico europeo, el sueco Lennart Johansson, quien también comunicó que la final de la Liga de Campeones de ese año se jugará en el Old Trafford, de Manchester (Inglaterra), con lo que se vieron truncadas las aspiraciones del Madrid de organizarla en el Bernabéu como colofón a las celebraciones d...

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El estadio de La Cartuja, de Sevilla, acogerá en 2003 la final de la Copa de la UEFA, un evento al que también aspiraban otros campos, entre ellos el Villa Park, de Birmingham (Inglaterra), o el Saint Denis, de París (Francia). Su elección fue anunciada ayer por el presidente del máximo organismo futbolístico europeo, el sueco Lennart Johansson, quien también comunicó que la final de la Liga de Campeones de ese año se jugará en el Old Trafford, de Manchester (Inglaterra), con lo que se vieron truncadas las aspiraciones del Madrid de organizarla en el Bernabéu como colofón a las celebraciones de su centenario a lo largo de 2002.

El Comité Ejecutivo de la UEFA también decidió que la fórmula de la Liga de Campeones permanezca invariable durante al menos tres años a pesar de que se había planteado la posibilidad de suprimir la segunda fase liguera debido a la saturación de partidos, informa Europa Press. 'Hemos hablado con los clubes y la mayoría apoya el sistema vigente de 32 equipos y dos fases de liguillas', explicó Johansson.

La noticia relativa a La Cartuja fue recibida con gran alborozo en Sevilla tanto por los responsables del estadio como por las autoridades municipales, que consideran que la final supone un nuevo 'espaldarazo' a la candidatura olímpica para 2012. Además, dicha elección permitirá rebajar la intensidad de las críticas que ha suscitado este recinto deportivo desde su construcción para los Campeonatos del Mundo de atletismo de 1999. Con 60.000 plazas, costó cerca de 21.000 millones de pesetas, pero apenas tiene uso. No obstante, sus responsables recuerdan que ya ha sido escenario de dos finales de la Copa del Rey y de varios encuentros de la selección.

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