El Barça se luce ante el Olimpia
Jasikevicius brilla en el quinto triunfo del equipo azulgrana
De forma brillante, casi inesperada, y con un último cuarto para el lucimiento, el Barcelona sumó ayer su quinta victoria en Europa (81-61) ante un Olimpia que defraudó buena parte de las expectativas creadas. Los eslovenos, que dieron muestras de tener muy buenos fundamentos, no pudieron, sin embargo, con la experiencia y el potencial azulgrana.
El Olimpia hizo del primer cuarto lo que un niño malo con un caramelo: lo enseñó bonito con el envoltorio y luego lo escondió de forma inesperada. Y fue así como, en poco más de cinco minutos, el juego preciosista y fresco que había aupado a lo...
De forma brillante, casi inesperada, y con un último cuarto para el lucimiento, el Barcelona sumó ayer su quinta victoria en Europa (81-61) ante un Olimpia que defraudó buena parte de las expectativas creadas. Los eslovenos, que dieron muestras de tener muy buenos fundamentos, no pudieron, sin embargo, con la experiencia y el potencial azulgrana.
El Olimpia hizo del primer cuarto lo que un niño malo con un caramelo: lo enseñó bonito con el envoltorio y luego lo escondió de forma inesperada. Y fue así como, en poco más de cinco minutos, el juego preciosista y fresco que había aupado a los eslovenos hasta el 2-7 se quedó, por gracia de Jasikevicius, en un 25-14 al finalizar el primer asalto. Contra su ex equipo, el base lituano del Barcelona afiló la muñeca para mitigar la efectividad del nigeriano Awojobi, hasta entonces el jugador más certero de los eslovenos.
BARCELONA 81| OLIMPIA 61
Barcelona: Jasikevicius (16), De la Fuente (8), Karnisovas (6), Okulaja (11), Alzamora (3) -cinco inicial-; Nacho Rodríguez (1), Navarro (17), Digbeu (8), Rentzias (0), Ekonomou (0) y Dueñas (11). Olimpia: Ilevski (3), Zdvoc (0), Hukic (2), Awojobi (18), Nicevic (2) -cinco inicial-; Golemac (2), Modric (0), Udrih (4), Stevanof (3) y Mujezinovic (14). Árbitros: Koukoulekidis, Dozai, Gondas. Palau Blaugrana, 7.600 espectadores. Séptima jornada de la Euroliga.
El 38-33 que lucía al descanso fue un nuevo engaño de los jugadores de Zmago Sagadin. Lejos de amenazar la hegemonía del Barcelona, el Olimpia dejó que los azulgranas hicieran del resto del encuentro un monólogo dedicado al espectáculo.