Entrevista:JOSÉ MARÍA VÁZQUEZ QUINTANA | PRESIDENTE DE LA COMISIÓN DE TELECOMUNICACIONES

'El sector sufre por la financiación, no por la regulación'

La CMT vigilará que las fusiones no violen la competencia como consecuencia de la crisis

José María Vázquez Quintana es presidente de la Comisión del Mercado de Telecomunicaciones (CMT) desde 1997, año en que se constituyó este organismo, el máximo regulador del sector encargado de velar por la competencia en el sector.

Pregunta. ¿Les preocupa la crisis que atraviesa el sector y sus consecuencias en España?

Respuesta. Nos preocupa mucho. Los proyectos interesantes que han arrancado y necesitan la confianza de los inversores para madurar no cuentan ahora con el mismo entusiasmo de esos inversores. Y eso puede hacer que no lleguen al mercado ofertas que p...

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José María Vázquez Quintana es presidente de la Comisión del Mercado de Telecomunicaciones (CMT) desde 1997, año en que se constituyó este organismo, el máximo regulador del sector encargado de velar por la competencia en el sector.

Pregunta. ¿Les preocupa la crisis que atraviesa el sector y sus consecuencias en España?

Respuesta. Nos preocupa mucho. Los proyectos interesantes que han arrancado y necesitan la confianza de los inversores para madurar no cuentan ahora con el mismo entusiasmo de esos inversores. Y eso puede hacer que no lleguen al mercado ofertas que podrían beneficiar al ciudadano. Los negocios siguen siendo buenos, sin embargo, nadie está consiguiendo menos de lo que se proponía en sus planes de negocio, y es de esperar que la confianza inversora vuelva.

'Estoy de acuerdo en que se libere a los operadores de cable de algunos compromisos que adquirieron cuando ganaron los concursos'
'Tenemos interés en que haya más competencia, pero la que existe ha sido muy efectiva, como prueba la bajada de precios'
'Estableceremos el fondo para costear el servicio universal cuando se incorpore el acceso a Internet, a lo largo de 2002'

P. La crisis puede empujar a fusiones entre operadores. La CMT, ¿tiene algo que decir en estos procesos?

R. En la CMT somos competentes en esta materia en la medida que afecta a la competencia. E intervendríamos si vemos que un mismo accionista está en dos operadores a la vez y vulnera las normas de la competencia. Pero no creo que ése sea el problema. El propio juego de la competencia es lo que va a hacer que cambie el escenario, los accionistas y los propios proyectos. Va a haber muchos cambios porque nadie puede pensar que en un sector tan dinámico se haya acertado con el modelo de negocio que eligió desde el primer día.

P. Los competidores de Telefónica se quejan de que la legislación no les protege suficientemente y que por eso España es uno de los países donde al antiguo monopolio ha perdido menos cuota de mercado.

R. En eso no tienen razón. No creo que ningún nuevo operador que quiera entrar en este negocio tropiece con las reglas de competencia ni con su aplicación. Las dificultades que les han surgido no son de la regulación, sino las propias de cualquier negocio. Provienen de la financiación y de conseguir cuota de mercado, pero no de la regulación. Al revés, creo que las reglas les están ayudando como en ningún otro sector. Éste es un sector que está madurando tras 70 años de monopolio, y pensar que de repente alguien puede entrar y tocar la campana de oro es una utopía. Por nuestra parte, hasta que no esté la competencia bien establecida seguiremos aplicando criterios de regulación asimétrica. Tenemos interés en que se establezca la competencia, pero la que hay ha sido muy efectiva y lo prueba el hecho de que han bajado los precios como nunca ni en ningún otro sector.

P. ¿Las relaciones con Telefónica son difíciles?

R. Son muy escasas y formalizadas. A la Comisión no nos gusta tener demasiada intimidad con los operadores para juzgar con objetividad.

P. Pero Telefónica se queja, por ejemplo, de que debe costear en solitario el servicio universal pese a que la Ley de Telecomunicaciones prevé la creación de un fondo universal al que deben contribuir todos los operadores..

R. Es indudable que el servicio universal tiene un coste. Telefónica hizo unos cálculos iniciales de alrededor de 180.000 millones de pesetas que ni nosotros ni la propia Comisión Europea considerábamos bien calculados. Ahora estamos esperando a que nos reenvíe esas cifras revisadas. En cuanto al fondo para costear el servicio universal, el momento oportuno para su constitución será antes de que se incorporen a él más cosas, como al acceso a Internet, algo que puede suceder a lo largo 2002.

P. Los competidores de Telefónica también se quejan. No les ha gustado nada la regulación de temas como los precios del ADSL, en el que, por cierto, la CMT sacó unas medidas cautelares contra Telefónica durísimas y luego rectificó.

R. Con toda honestidad creo que se nos fue la mano en las primeras medidas cautelares cuando pusimos los precios. Hubo una reconsideración de esa resolución primera porque con los cálculos que habíamos realizado, y a la vista de nuevos datos, entendimos que nadie hubiera entrado en el negocio del ADSL, ni Telefónica ni sus competidores. Ahora bien, también los precios revisados son provisionales, y cuando estudiemos bien los costes fijaremos los precios definitivos.

P. Y la apertura del bucle de abonado sin el que, según los operadores, no será posible abrir la telefonía local.

R. La apertura de bucle de abonado no se corresponde directamente con que todos ofrezcan llamadas locales, que eso ya lo hacen, sino que tiene que ver con que los operadores puedan ofrecer los servicios a sus abonados cobrando una cuota de abono como la que cobra Telefónica. La regulación ya lo permite, pero hay poco uso de esta facilidad. Sólo quiero hacer una reflexión en voz alta. Si Telefónica dice que tiene un déficit por prestar ese servicio y los entrantes tienen que realizar unos gastos para poder acceder a las centrales y al domicilio de los abonados, ¿dónde está el negocio? Tengo mis dudas de que alquilar el bucle local sea tan atractivo como dicen algunos.

P. También está el debate del cable. Los operadores de cable se quejan de que el ministerio libera a Telefónica de su obligación de invertir en cable y, sin embargo, ellos tiene que afrontar y avalar compromisos de inversión por más de un billón de pesetas.

R. No me gustan las obligaciones impuestas porque sí, ni para Telefónica ni para nadie. Las obligaciones deben ser siempre mínimas y circunscribirse a aquellas que hagan que la competencia sea justa y honesta. Imponerle a alguien dónde tiene que invertir no favorece la competencia. Y si Telefónica no encuentra negocio en el cable y prefiere otras tecnologías, no parece bueno obligarla a invertir. Además, ¿qué ganan las compañías de cable con que Telefónica tienda su red de cable? Ahora bien, yo sí estaría de acuerdo en que se les liberara a los operadores de cable de algunos compromisos que adquirieron cuando ganaron los concursos, y tienen razón los operadores de cable cuando en su reflexión dicen que no tiene sentido que se conserven los mismos compromisos si han cambiado las reglas. En cualquier caso, se trata de una decisión política que corresponde al Gobierno, no a la CMT, porque en materia de inversiones no siempre es la competencia lo único que debe considerarse.

P. Hace un año el Gobierno, siguiendo las recomendaciones de la CMT, anunció que sacaría una nueva licencia de móvil y aprobaría los operadores virtuales, pero no sólo no hay nuevas compañías, sino que uno de ellos, Xfera, acaba de arrojar la toalla.. Si a eso añadimos la tasa radioeléctrica...

R. La CMT no puede ser examinador del Gobierno en ningún aspecto. En cualquier caso, no creo que lo que haya fallado tenga que ver con eso. El origen de los problemas por los que está atravesando la telefonía móvil está en el cambio radical de la percepción que tiene el mundo financiero del sector, que ha pasado de pensar que era un negocio estupendo para meter el dinero y ahora lo consideran un lugar maldito.

El espectro radioeléctrico no es nuestra responsabilidad, y no es nuestro papel ni nuestro gusto apostillar decisiones ajenas. Lo único que cabe decir desde la perspectiva del mercado es que cuanto menores sean las cargas impuestas a estos negocios más fácil será que, a impulsos de la competencia, se trasladen a rebajas en los precios para los consumidores. En cuanto a Xfera , si algo es negocio o no, lo tienen que decidir las compañías.

José María Vizcaíno Quintana, presidente de la CMT.LUIS MAGÁN

'Estaría encantado en seguir, pero no lo veo probable'

Pregunta. El sector se queja de que existe un cierto lío de competencias.

Respuesta. Quien hace las reglas es el Gobierno, la CMT sólo vigila su cumplimiento y su aplicación en beneficio de la competencia. Tenemos todos los poderes que necesitamos y hay que ser muy prudentes para administrarlos. Quizá el único punto sea la regulación de precios de Telefónica, un aspecto muy importante que nos está vedado. No es que nosotros queramos regular los precios; más bien nos gustaría que nadie tuviera esa parcela y que el mercado evolucione de tal forma que no haya que decirle a Telefónica cuánto tiene que cobrar.

P. ¿Se llevan bien con el Ministerio de Ciencia y Tecnología? ¿No queda pendiente el conflicto de las licencias de televisión por cable?

R. Con Ciencia y Tecnología no tenemos demasiadas relaciones porque lo que ellos hacen es aplicar la política del Gobierno y plasmarla en las reglas. En el caso de las licencias de redes de cable, cierto que parecemos tener distintas interpretaciones, y si es así, lo mejor es que el asunto lo fije la Audiencia Nacional.

P. ¿Cuándo habrá una renovación en la CMT? ¿Va a seguir usted en la presidencia?

R. Tras la última remodelación, nos toca una nueva renovación de cargos en noviembre del año que viene. Aunque se puede repetir un mandato, en mi caso no veo probable esa renovación. Si me lo piden, repetiría, pero no lo espero. Si se diera cosa tan rara como que no encontrasen a nadie, yo estaría encantado, pero ya le digo que me parece muy improbable.

P. La CMT ha sufrido recientemente algunas fugas de altos cargos, que han sido fichados por operadores. ¿No sería necesario ampliar el régimen de incompatibilidades?

R. Es natural que los operadores identifiquen pronto a personas que tan a fondo conocen las peculiaridades de su propio negocio, y, desde luego, ni tenemos posibilidades, ni las pretendemos, de pagar a nuestros colaboradores lo que el mercado dice que vale su aportación. El mantenimiento de la confidencialidad es una condición de nuestros contratos de trabajo perfectamente exigible y, a mi juicio, perfectamente respetada hasta ahora.

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