La gloriosa aventura de Tote
Jorge López Marco, Tote (Madrid, 1978), llevaba tres años entre litigios y banquillos, mitad aburrido y mitad harto. El domingo blandió su zurda en La Rosaleda como un Maradona peso pluma, provocó un penalti y marcó un tanto tan espectacular como decisivo (minuto 92) para la victoria del Valladolid sobre el Málaga: recorrió 40 metros, engañó a Litos, sentó a Contreras y disparó entre Sanz y el propio Litos. Un gol redentor.
Los últimos tres años de Tote fueron una sucesión de golpes a su vanidad. El primero, en el Madrid B, en el que su relación con el técnico, Miguel Ángel Por...
Jorge López Marco, Tote (Madrid, 1978), llevaba tres años entre litigios y banquillos, mitad aburrido y mitad harto. El domingo blandió su zurda en La Rosaleda como un Maradona peso pluma, provocó un penalti y marcó un tanto tan espectacular como decisivo (minuto 92) para la victoria del Valladolid sobre el Málaga: recorrió 40 metros, engañó a Litos, sentó a Contreras y disparó entre Sanz y el propio Litos. Un gol redentor.
Los últimos tres años de Tote fueron una sucesión de golpes a su vanidad. El primero, en el Madrid B, en el que su relación con el técnico, Miguel Ángel Portugal, fue de mal en peor. El segundo, en el Benfica, cedido y sin jugar. El último en el Madrid, contemplando con desánimo cómo Vicente del Bosque prescindía de él: jugó 46 minutos. En el verano fue cedido al Valladolid.
En cualquier caso, él relata su gran tanto casi como un suceso anodino: 'Fernando me dio la pelota pegada a la banda. Recibí y miré. Estaba solo contra todos los de atrás. No tenía a quién centrar y me arriesgué. Me salió Litos y me paré para luego arrancar directo al área. Contreras me achicó, amagué con la zurda y me fui hacia adentro, donde le pegué con la derecha. Y ya está'. Un sencillo relato de una aventura gloriosa.