Un juez investiga supuestas emisiones tóxicas en una empresa de Leganés

El Juzgado de Instrucción número 1 de Leganés ha abierto diligencias por supuesta emisión de sustancias nocivas para la salud a la empresa Tapón Corona, que fabrica tapones para envases de refrescos en pleno corazón de esta localidad de 173.000 habitantes. El alcalde, el socialista José Luis Pérez Ráez, informó ayer de que el Ayuntamiento también ha denunciado ante la Comunidad los 'repugnantes olores a ácido' que emanan de la empresa, que da trabajo a 50 familias del municipio.

Las diligencias judiciales son fruto de una denuncia interpuesta por la Fiscalía de Medio Ambiente del Tribun...

El Juzgado de Instrucción número 1 de Leganés ha abierto diligencias por supuesta emisión de sustancias nocivas para la salud a la empresa Tapón Corona, que fabrica tapones para envases de refrescos en pleno corazón de esta localidad de 173.000 habitantes. El alcalde, el socialista José Luis Pérez Ráez, informó ayer de que el Ayuntamiento también ha denunciado ante la Comunidad los 'repugnantes olores a ácido' que emanan de la empresa, que da trabajo a 50 familias del municipio.

Las diligencias judiciales son fruto de una denuncia interpuesta por la Fiscalía de Medio Ambiente del Tribunal Superior de Justicia de Madrid. En ella, el fiscal recoge las insistentes quejas de los 10.000 vecinos del barrio de San Nicasio y aporta muestras y análisis que revelan la supuesta emisión desde esta industria de sustancias tóxicas para la salud.

Los vecinos, según las diligencias judiciales, abiertas con el número 619/20001, llevan años conviviendo con los irrespirables olores de esta industria. Sostiene el fiscal que la ubicación de Tapón Corona 'vulnera el reglamento de actividades de 1961'. Esta firma está situada en el barrio de la Estación, en un polígono industrial separado de cientos de viviendas por una vía férrea de constante trasiego. A esto los vecinos suman 'los olores' y también 'los vertidos al medio acuático y emisiones al medio atmosférico de carácter tóxico' de esta industria.

Según la fiscalía, los vertidos 'al sistema integral de saneamiento' de Leganés rebasan los topes legales. 'Las muestras tomadas [en la red de saneamiento] por todos los organismos oficiales independientes han dado resultados positivos en cuanto [al vertido de] contaminantes tóxicos no autorizados', se indica en la denuncia que ya investiga el citado juzgado.

Parte de los vertidos supuestamente tóxicos que emite la empresa Tapón Corona de Leganés han ido a parar 'al colector denominado Renfe', según la denuncia, que basa esta afirmación en los análisis efectuados a partir de muestras tomadas en ese colector por la Guardia Civil del Seprona (Servicio de Protección a la Naturaleza).

Los productos tóxicos se producen 'en el proceso de utilización de algunos barnices y en el de secado de los mismos', indica la fiscalía, que asegura que tales contaminantes tóxicos podrían eliminarse si la industria estableciese un mayor control de sus emisiones y eligiese un barniz especial que, combinado con determinados disolventes, evitaría sus actuales emisiones tóxicas.

El alcalde de Leganés, el socialista José Luis Pérez Ráez, admite el gran malestar entre el vecindario cercano a la empresa, pero señala que solucionar este problema 'resulta complejo', ya que de esa industria viven 50 familias 'desde hace 30 años'. Según Pérez Ráez, la Comunidad obligó hace años a esta industria a colocar filtros para evitar los olores, pero 'la verdad es que el problema sigue ahí. Cuando el viento se dirige hacia las casas, el olor, y yo mismo lo he podido comprobar, es insoportable', señala.

El Ayuntamiento ha dialogado sobre este problema con los dueños de Tapón Coronas, de procedencia mexicana. 'La industria está dispuesta a cambiar de emplazamiento sin marcharse de Leganés, pero a cambio pide que se recalifique como urbanizable la enorme extensión de terrenos que ocupa para poder venderlos y hacer viviendas. Pero eso', señala el regidor, 'es complicado, ya que la empresa está ubicada en un polígono industrial y es ilógico permitir casas en un polígono'. 'Los nuevos vecinos también se quejarían. Yo no veo una manera de arreglar este tema', remacha el alcalde.

Expedientes sancionadores

La fiscalía ha solicitado al juez instructor que reclame a la Comunidad 'todos los expedientes sancionadores iniciados contra esta empresa' y que cite 'como imputado' de un supuesto delito medioambiental a su 'consejero delegado'. También demanda el fiscal al juez que oficie al Seprona para que, 'en un plazo no superior a tres meses y sin previa comunicación', tome nuevas muestras de vertidos de la empresa. Si estos análisis dan positivo, el fiscal sugiere al juez 'que se suspenda la autorización que posee la empresa para efectuar vertidos al sistema integral de saneamiento'.

Respecto a las emisiones atmosféricas, la fiscalía considera que éstas pueden ser nocivas para la 'densa' población de la zona en que se ubica la factoría. Por ello, pide al juez que oficie 'con la mayor urgencia posible' al servicio de inspección de seguridad e higiene en el trabajo de la Comunidad para que 'inspeccione la empresa' y acredite si cumple con las normas laborales y medioambientales.

La fiscalía también solicita al juez que oficie a la 'Dirección General de Calidad y Evaluaciación Ambiental de la Consejería de Medio Ambiente para que, a la mayor brevedad posible, remita al juzgado la información de que disponga sobre los efectos' que producen 'en las personas los compuestos orgánicos volátiles' que emite esta empresa; y que efectúe una 'medición de los niveles de emisión e inmisión de los grupos más nocivos en la empresa y su entorno'. Un portavoz de Tapón Corona señaló ayer a este periódico que no tenían comunicación oficial del proceso abierto contra la empresa, informa F. Javier Barroso. Tan sólo conocían que el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil estuvo en la fábrica hace unos días para tomar muestras de agua y del aire. Este portavoz destacó que la factoría lleva abierta más de 35 años, sin que se hayan producido enfermedades destacadas entre sus trabajadores. 'Ésa es la mejor señal de que nuestro proceso de fabricación y los barnices que utilizamos están homologados y no producen efectos nocivos para las personas', aseveró.

La empresa dispone, entre otros, del certificado de Aenor ISO 14001, que se otorga a compañías que respetan el medio ambiente. 'Tapón Corona tiene empresas en Estados Unidos y Francia y jamás ha dado el mínimo problema', concluyó el portavoz.