FLICK, FLOCK Y LA LEGIÓN CÓNDOR

El embajador de Alemania en España, Joachim Bitterlich, impuso, en nombre del presidente alemán, Johannes Rau, la Gran Cruz del Mérito Federal a Dieter Koniecki, que ha representado durante más de un cuarto de siglo en España a la fundación socialdemócrata Friedrich Ebert. Koniecki, cuyo nombre todavía hoy día resulta impronunciable para muchos españoles, incluso para sus amigos del PSOE, aprovechó la ocasión para largar un discurso en el que repasó sus largos años de actividad en España. No escabulló el bulto Koniecki y no tuvo el menor reparo en referirse a uno de los sucesos en los que se e...

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El embajador de Alemania en España, Joachim Bitterlich, impuso, en nombre del presidente alemán, Johannes Rau, la Gran Cruz del Mérito Federal a Dieter Koniecki, que ha representado durante más de un cuarto de siglo en España a la fundación socialdemócrata Friedrich Ebert. Koniecki, cuyo nombre todavía hoy día resulta impronunciable para muchos españoles, incluso para sus amigos del PSOE, aprovechó la ocasión para largar un discurso en el que repasó sus largos años de actividad en España. No escabulló el bulto Koniecki y no tuvo el menor reparo en referirse a uno de los sucesos en los que se encontró implicado en los años de la transición: el caso Flick. La financiación de partidos políticos españoles a través de las fundaciones alemanas provocó la célebre frase de Felipe González en el Parlamento: "No he recibido ni un duro, ni una peseta, ni de Flick, ni de Flock". Koniecki dijo en su discurso en la Embajada alemana: "Todos los aquí presentes recuerdan la tormenta del famoso caso Flik y Flock. Y digo hoy, como lo dije cuando tuve que comparecer con mis colegas de otras fundaciones alemanas ante la comisión parlamentraia en 1985: No me arrepiento de un solo centavo que hemos recibido de las autoridades alemanas o inclusive de algunas empresas, porque era dinero para una causa noble". Concluyó Koniecki sobre los duros y pesetas de Flick: "Todo lo que pudiera haber sumado no llega ni a la mitad del coste de las bombas que una tarde cayeron sobre Guernica".

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