Adalberto atendió ayer a las clientas 'amable como siempre'

'Adalberto ha matado a la chica que trabajaba con él, a su novio y luego se ha suicidado. Es increíble. Esta mañana estaba muy tranquilo, nada nervioso y tan amable como siempre', explicaba Inés, una de las clientas de la consulta de podología.

Inés recordaba que ella llegó puntual a su cita de ayer. A las 9.30 horas llamó al portero automático de la consulta, en el número 82 del Camino Viejo de Leganés. Minutos después, Adalberto bajó para abrirle la puerta. A las 10.10, Inés se despidió tranquilamente de Adalberto hasta la próxima cita, sin sospechar lo que este hombre iba a protagoni...

'Adalberto ha matado a la chica que trabajaba con él, a su novio y luego se ha suicidado. Es increíble. Esta mañana estaba muy tranquilo, nada nervioso y tan amable como siempre', explicaba Inés, una de las clientas de la consulta de podología.

Inés recordaba que ella llegó puntual a su cita de ayer. A las 9.30 horas llamó al portero automático de la consulta, en el número 82 del Camino Viejo de Leganés. Minutos después, Adalberto bajó para abrirle la puerta. A las 10.10, Inés se despidió tranquilamente de Adalberto hasta la próxima cita, sin sospechar lo que este hombre iba a protagonizar unas horas más tarde.

'Cuando llegué, me bajó a abrir la puerta como siempre, porque es muy pesada y yo, con las muletas, no puedo con ella', relató Inés. 'Al entrar, hasta me abrió una bolsa de caramelos. Yo quería coger sólo uno, pero él me convenció para que cogiera uno de limón y otro de naranja', indicó Inés.

'La señorita que trabajaba con él estaba también muy normal y nada nerviosa. Yo nunca había hablado mucho con ella, sólo comentamos algo del tiempo, una conversación intrascente como siempre', puntualizó. 'Pero el nerviosismo sí lo hubiera notado porque era ella quien me atendía en todas las citas. Hoy me ha curado los pies tan bien como siempre'. Inés tampoco sabía nada de los problemas que se comentaban referentes al supuesto maltrato del podólogo a su mujer. 'No lo puedo entender... conmigo era una persona correctísima y muy amable'.

Otra de sus clientas suspiraba aliviada por la casualidad que evitó que ella y su madre acudieran a la consulta de Adalberto a las doce de la mañana. Estas mujeres habían olvidado que tenían cita. Por eso, alrededor de la una del mediodía, Adalberto llamó a su casa preguntando la causa del retraso. Entonces, las dos mujeres decidieron retrasar la consulta, por lo que volvieron a telefonear al filo de las dos de la tarde, sin que ya nadie respondiera a la llamada.'Ya habría matado a Toñi y a su novio', dijo entristecida.

La versión de esta vecina sobre la personalidad de Adalberto es completamente diferente a la de Inés. Para ella, Adalberto 'era una persona que se comportaba de una forma con los clientes y de otra con su esposa'. 'Por eso, ella se fue hace dos meses a ver a sus padres a Uruguay y no ha vuelto'.