Un muerto y tres heridos en un tiroteo entre 'narcos' en Las Barranquillas

El tiroteo se produjo a la dos y media de madrugada en un camino de tierra que discurre paralelo a la carretera de Villaverde a Vallecas, al lado de un aparcamiento de la empresa Seur y justo enfrente del edificio donde se encuentran la instalaciones centrales de la compañía de transporte. Las víctimas, que viajaban a bordo de una furgoneta Peugeot, llegaron al lugar procedente de la calle Polvorines, que conduce al poblado chabolista conocido como el Pozo del Huevo y, más allá, a Las Barranquillas, cuando fueron interceptados por un monovolumen Renault Space en el que viajaban cinco personas....

El tiroteo se produjo a la dos y media de madrugada en un camino de tierra que discurre paralelo a la carretera de Villaverde a Vallecas, al lado de un aparcamiento de la empresa Seur y justo enfrente del edificio donde se encuentran la instalaciones centrales de la compañía de transporte. Las víctimas, que viajaban a bordo de una furgoneta Peugeot, llegaron al lugar procedente de la calle Polvorines, que conduce al poblado chabolista conocido como el Pozo del Huevo y, más allá, a Las Barranquillas, cuando fueron interceptados por un monovolumen Renault Space en el que viajaban cinco personas.

Lo agresores, armados con al menos una pistola, una escopeta y otras armas de fuego que aún no han sido determinadas, les conminaron a bajar del vehículo y a sangre fría, sin darles tiempo a defenderse, empezaron a disparar. Una de las víctimas, que posteriormente sería identificada como Juan Ramón Vázquez Cortes, de 36 años, recibió cinco impactos de bala. Uno de ellos, en la cabeza, le causó la muerte en el acto. Los otros cuatro tiros le agujerearon el tórax. Los demás ocupantes de la furgoneta, Agustín Cortés Vega, de 28 años y primo del fallecido; el hermano de éste, Jerónimo, de 20, y Francisco Ortega García, de 40 y cuñado del fallecido, fueron alcanzados a unos 200 metros cuando trataban de huir.

Jerónimo recibió un disparo en el hemitórax izquierdo. A su hermano Agustín le propinaron un fuerte golpe en la cabeza. Francisco Ortega salió peor parado: un tiro en el abdomen. A continuación los agresores se dieron a la fuga en el mismo vehículo en el que habían llegado.

El tiroteo fue presenciado por una pareja de vigilantes jurados de la empresa Prosegur que prestan servicio nocturno en el aparcamiento de la compañía de transportes y que avisaron a la Policía. Los dos hermanos heridos fueron trasladados al hospital Gregorio Marañón, y Francisco Ortega, al Doce de Octubre, donde permanece en la UVI con lesiones de pronóstico reservado. El cadáver de Juan Ramón fue conducido al Instituto Anatómico Forense y hoy será entrerrado en la localidad toledana de Mocejón.

Del caso se ha hecho cargo el grupo de Homicidios del Cuerpo Nacional de Policía. Aunque los antecedentes del fallecido correspondían a delitos por robo, todas las sospechas se encaminan a que el tiroteo se debió a un ajuste de cuentas por venta de droga. Según esta hipótesis, los agresores forman parte de una familia rival dedicada al narcotráfico. Ya con anterioridad habían mantenido disputas. Ahora las investigaciones se encaminan a tratar de identificar el vehículo y a los agresores para proceder a su detención antes de que se desencadene una venganza.