GENTE

UNA EXÓTICA MISA BAJO EL HIELO

Una de las misas más exóticas fue oficiada recientemente en el norte de Rusia. Un grupo de submarinistas abrieron un agujero en el hielo que cubre el lago Valdái y se sumergieron en sus prístinas aguas junto con el padre Nicandro. Era la primera vez que este pope ortodoxo, monje del monasterio de la Virgen de Iveria, se ponía un traje con balones de oxígeno, por lo que se explica que sólo al tercer intento lograra mantenerse a una profundidad de ocho metros, donde comenzó a decir la misa submarina. Las lámparas de los deportistas iluminaban bajo las aguas el icono de la Virgen de Iveria...

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Una de las misas más exóticas fue oficiada recientemente en el norte de Rusia. Un grupo de submarinistas abrieron un agujero en el hielo que cubre el lago Valdái y se sumergieron en sus prístinas aguas junto con el padre Nicandro. Era la primera vez que este pope ortodoxo, monje del monasterio de la Virgen de Iveria, se ponía un traje con balones de oxígeno, por lo que se explica que sólo al tercer intento lograra mantenerse a una profundidad de ocho metros, donde comenzó a decir la misa submarina. Las lámparas de los deportistas iluminaban bajo las aguas el icono de la Virgen de Iveria y el crucifijo con los que el pope se sumergió. El padre Nicandro explica que se decidió a oficiar una misa bajo las heladas aguas del Valdái 'con el fin de glorificar a la Iglesia'. Al volver a la superficie, el monje regaló el icono de la Virgen al club de submarinistas Ictiandro. Alexandr Orlov, vicepresidente de la Federación de Submarinismo de Nóvgorod, inspirado por la acción del padre Nicandro, ha propuesto lanzar el proyecto Aguas Limpias de los Monasterios Ortodoxos y oficiar una serie de misas submarinas cerca de las iglesias que hay a orillas del Valdái y del Lágoda.-

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