Faulty Optic suma humor negro y surrealismo para crear sus marionetas

Humor negro, escenarios mecanizados, objetos con vida propia, películas de animación, robots y, sobre todo, mucha sensibilidad, contribuyen a crear la atmósfera surrealista que rodea sus obras. 'Faulty Optic es uno de los secretos mejor guardados de toda Gran Bretaña. Han paseado sus montajes por todo el mundo y siempre cautivan por su extrema sensibilidad', comenta Manuel Llanes, coordinador del teatro Central.

Las entradas para las tres representaciones programadas se agotaron el pasado lunes a las pocas horas de ponerse a la venta, lo que ha llevado al teatro a ofrecer otra función e...

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Humor negro, escenarios mecanizados, objetos con vida propia, películas de animación, robots y, sobre todo, mucha sensibilidad, contribuyen a crear la atmósfera surrealista que rodea sus obras. 'Faulty Optic es uno de los secretos mejor guardados de toda Gran Bretaña. Han paseado sus montajes por todo el mundo y siempre cautivan por su extrema sensibilidad', comenta Manuel Llanes, coordinador del teatro Central.

Las entradas para las tres representaciones programadas se agotaron el pasado lunes a las pocas horas de ponerse a la venta, lo que ha llevado al teatro a ofrecer otra función el domingo día 14.

La compañía, que estará también en el teatro Alhambra de Granada los días 16 y 17, nació en Londres en 1988 y Dussstlouse snuffhouse se ha convertido en su obra emblemática, llevan diez años paseándola por el mundo; aunque Fauty Optic, codirigida por Gavin Glover y Liz Walker ha producido desde su creación seis espectáculos. El estreno en España de estas dos producciones se ofrecen con la colaboración del British Council.

'Es muy fácil hacer marionetas que se limiten a copiar el teatro de actores, por eso nosotros decidimos prescindir del texto. Desde el principio nos propusimos explorar nuevas formas de comunicación para las marionetas porque es un género que está infravalorado', asegura Gavin Glover.

Los fundadores de esta peculiar compañía son responsables de todo el proceso creativo. Desde la idea de la historia, la construcción de las marionetas, la puesta en escena y la interpretación. A veces, como ocurre con las dos piezas que ofrecen ahora, hasta se inventan palabras para sus títulos o las toman del argot más callejero.

'En Snuffhouse el tema es el aislamiento. Describimos los sentimientos de una persona que se ha quedado sola y que a veces refleja verdades universales. Por eso suele provocar reacciones contradictorias en el público', asegura Walker.

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