El presidente del PP de Huelva exige a los críticos que devuelvan sus actas de diputados
Francisco Pérez buscó ayer transmitir una imagen de serenidad en medio de la crisis que vive el PP de Huelva y rehuyó el cuerpo a cuerpo en la polémica con los críticos. Según Pérez, el trabajo es la única salida a los problemas existentes en el partido. 'Yo seguiré trabajando 20 horas al día y que cada cual haga en la vida el papel que quiera. Mi estrategia: trabajar y trabajar. El examen auténtico llegará con las elecciones municipales. Ahí hablaremos', afirmó. El presidente popular reiteró que, tras el congreso, para él desaparecieron todos los sectores y los grupos que pudieran haber en el...
Francisco Pérez buscó ayer transmitir una imagen de serenidad en medio de la crisis que vive el PP de Huelva y rehuyó el cuerpo a cuerpo en la polémica con los críticos. Según Pérez, el trabajo es la única salida a los problemas existentes en el partido. 'Yo seguiré trabajando 20 horas al día y que cada cual haga en la vida el papel que quiera. Mi estrategia: trabajar y trabajar. El examen auténtico llegará con las elecciones municipales. Ahí hablaremos', afirmó. El presidente popular reiteró que, tras el congreso, para él desaparecieron todos los sectores y los grupos que pudieran haber en el PP onubense. 'Yo no miro la matrícula a nadie. Sólo me interesa el futuro', afirmó Pérez.
Los dirigentes críticos buscaron, tras su derrota en el cónclave, que los expulsaran del partido, según la dirección provincial. Francisco Pérez distribuyó en octubre las áreas de trabajo entre el grupo de diputados pero los críticos, integrados en el denominado grupo Tartessos, rechazaron asumir esas responsabilidades. El presidente provincial comenzó entonces a negociar la integración individualmente con los políticos más destacados del sector críticos, dejando al margen a sus principales dirigentes, Francisco Nieves, Ana Báñez y Jesús García.
Minar el peso político
El objetivo consistía en minarles el peso político entre el 42% de los compromisarios que los apoyaron en el congreso, en que ningún militante viera en Nieves, Báñez o García una referencia. La estrategia dio resultado. Destacados integrantes del sector crítico, como Javier Berrio o Álvaro Burgos, expresaron públicamente su apoyo a la nueva dirección. La situación se hizo progresivamente insostenible para Nieves, Báñez y García, que han tenido que abandonar el PP, después de casi 20 años de militancia.
La dirección provincial del PP considera que, en gran medida, han conseguido desactivar a la oposición interna. La dirección considera también que las críticas de esos tres dirigentes harán a partir de ahora menos daño.
Francisco Pérez explicó ayer: 'Yo no he echado a nadie. Que quede claro. De aquí se han ido voluntariamente, porque han querido, tres personas. Y se han llevado algo que es nuestro. Los cargos de diputados provinciales se obtienen por votación de los concejales electos. Ellos firmaron un día un papel en el que prometían fidelidad al grupo. Yo confío en la ética de la gente, pero hay quien no cumple'.
Incluso desde el PSOE se expresaron ayer en torno a la crisis del PP. El portavoz socialista en el Ayuntamiento de Huelva, José Juan Díaz Trillo, aseguró que desde su grupo se observan estos acontecimientos con creciente preocupación. Porque Francisco Nieves es concejal en el Ayuntamiento onubense. Díaz Trillo exigió que Pedro Rodríguez, alcalde de Huelva, dé explicaciones sobre lo que está pasando en su partido, en su condición de vicepresidente regional del PP de Andalucía. 'El PP está roto. Alguien tendrá que decirnos qué ha pasado, porque un partido es el instrumento de resolución de los problemas de los ciudadanos. Los populares gobiernan en Huelva y los vecinos piden ahora una explicación seria', dijo.
Francisco Pérez, en su respuesta, se limitó a recomendar al dirigente socialista: 'Zapatero, a tus zapatos', en referencia, sin nombrarlo expresamente, a los problemas internos que se avecinan en el congreso municipal del PSOE de la capital onubense previsto para febrero.