Entrevista:KHALID ZAIDI | SINDICALISTA

'La Ley de Extranjería del Gobierno fomenta la esclavitud'

Llegó a Jaén hace varios años para estudiar Ingeniería, pero ahora su vida gira en torno a la ayuda que puede prestar a sus compatriotas que vienen del otro lado del Estrecho. Khalid Zaidi (Tetuán, Marruecos, 1964) es el responsable del centro guía de atención al inmigrante del sindicato UGT en Jaén, una provincia que alberga en estos momentos un contingente descomunal de mano de obra foránea para recoger una cosecha de aceituna histórica y a la que hacen guiños 20.000 parados de la tierra.

Pregunta. Parece que el fenómeno de la inmigración crece día a día sin atisbarse ninguna s...

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Llegó a Jaén hace varios años para estudiar Ingeniería, pero ahora su vida gira en torno a la ayuda que puede prestar a sus compatriotas que vienen del otro lado del Estrecho. Khalid Zaidi (Tetuán, Marruecos, 1964) es el responsable del centro guía de atención al inmigrante del sindicato UGT en Jaén, una provincia que alberga en estos momentos un contingente descomunal de mano de obra foránea para recoger una cosecha de aceituna histórica y a la que hacen guiños 20.000 parados de la tierra.

Pregunta. Parece que el fenómeno de la inmigración crece día a día sin atisbarse ninguna solución.

Respuesta. La problemática es similar a la de años anteriores, lo que ocurre es que ahora vienen más inmigrantes porque ya no hay tantas emigraciones interiores en las campañas agrícolas. El convenio marco de control de emigraciones internas de 1997 apenas se ha cumplido porque ahora muchos jiennenses y españoles no quieren ir a la aceituna y prefieren un trabajo más cómodo.

P. Tampoco parece que haya mucho ánimo por ofrecer alojamiento a los trabajadores de otros países.

R. En la mayoría de las localidades no se alquila viviendas a los inmigrantes. Los magrebíes tienen una mala fama injustificada, porque se tiende a generalizar entre toda una población un comportamiento negativo de algún miembro.

P. ¿Tan desesperada es la situación al otro lado del Estrecho para que la gente se juegue la vida en pateras?

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R. Sí, sirva como ejemplo que la atención médica en Marruecos no es gratuita. Además, la vida se está encareciendo y los salarios están congelados desde 1975, desde la Marcha Verde, y un trabajador de clase media no gana más de 1.000 pesetas al día.

P. ¿Qué le parece la Ley de Extranjería aprobada por el Gobierno español?

R. Creo que no va a solucionar ninguno de los problemas de la inmigración porque elimina derechos tan básicos como el de huelga, asistencia médica, escolarización de los niños, sindicación, etc. La Ley distingue entre inmigrantes documentados e indocumentados, o entre personas autorizadas y no autorizadas para trabajar, con lo cual ninguna persona no autorizada podrá denunciar nunca una situación de esclavitud porque en ese mismo momento puede ser expulsada del país. Esa ley, por tanto, fomenta la esclavitud.

P. ¿Por dónde puede venir entonces la solución a los problemas de la inmigración?

R. En primer lugar, reconociendo los derechos fundamentales de las personas. A todos los inmigrantes que vienen en pateras habría que preguntarles cuántas veces han solicitado el visado y cuántas veces se les ha denegado sin darle explicación y negarle el derecho a recurrir.