LA RENOVACIÓN SOCIALISTA

Luis Navarrete se impone a la candidatura crítica de Sevilla al conseguir el 65,3% de los votos

La ejecutiva, integrada únicamente por dirigentes de la mayoría, respaldada por el 85,9%

El candidato oficialista a la secretaría provincial del PSOE de Sevilla, Luis Navarrete, se impuso ayer con el 65,3% de los votos al aspirante crítico Jesús Rodríguez Román, quien obtuvo un respaldo algo mayor del esperado al conseguir el 34,4% de los sufragios. Pese a la existencia de dos listas, el congreso de los socialistas sevillanos se celebró en un clima de normalidad y sin la crispación de otras asambleas internas. El nuevo secretario general logró un respaldo mayor a su propuesta de ejecutiva que concitó el apoyo del 85,9% de los delegados, pese a estar formada exclusivamente por miem...

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El candidato oficialista a la secretaría provincial del PSOE de Sevilla, Luis Navarrete, se impuso ayer con el 65,3% de los votos al aspirante crítico Jesús Rodríguez Román, quien obtuvo un respaldo algo mayor del esperado al conseguir el 34,4% de los sufragios. Pese a la existencia de dos listas, el congreso de los socialistas sevillanos se celebró en un clima de normalidad y sin la crispación de otras asambleas internas. El nuevo secretario general logró un respaldo mayor a su propuesta de ejecutiva que concitó el apoyo del 85,9% de los delegados, pese a estar formada exclusivamente por miembros de la mayoría.

La victoria de Navarrete, presidente de la Diputación de Sevilla y secretario de Organización de la ejecutiva saliente, estaba cantada antes del congreso: su candidatura, apoyada por la mayoría orgánica de Sevilla, se conocía desde hace dos meses y presentó 293 avales de los 437 delegados. En votación secreta e individual, Navarrete logró 283 votos (65,3%), frente a las 149 papeletas (34,4%) que obtuvo Jesús Rodríguez Román, viceconsejero de Justicia y Administración Pública y ex alcalde de Estepa. Se computó un voto en blanco.Navarrete hizo un ofrecimiento de integración para la ejecutiva que no prosperó, ya que los críticos habían pedido nueve de los 29 puestos de la dirección. El nuevo secretario general les propuso dos puestos en áreas de responsabilidad y dos o tres vocalías. Sí se empleó la pura aritmética proporcional para la lista de miembros al comité director, en el que figuran 16 dirigentes de la mayoría por nueve de los críticos. El propio Rodríguez Román dijo que apoyaría la propuesta.

Al contrario que en otros congresos, la batalla por la secretaría general no tuvo el tono épico y crispado de anteriores procesos internos vividos en el PSOE de Sevilla, una de las agrupaciones más complejas de la federación andaluza, toda vez que empieza a ser habitual en este partido que haya más de un aspirante a la secretaría general y las cabinas de votación con más de una papeleta forman parte ya de la escenografía congresual.

El respaldo obtenido por Rodríguez Román fue algo mayor del esperado, ya que se calculaba en un principio que sus apoyos pivotarían en torno a un 30%. La candidatura del viceconsejero de Justicia surgió hace 15 días como una solución de consenso entre los diferentes grupos críticos que siempre han convivido en el PSOE de Sevilla y que demuestran una extraordinaria capacidad de movilidad orgánica. Pese a que tanto dirigentes de la mayoría como de la minoría creen que, esta vez, el grupo liderado por el viceconsejero de Justicia tiene visos de formar una oposición compacta, habrá que esperar un tiempo para comprobar si lo heterogéneo pasa a ser homogéneo.

Zapatero, de todos

Rodríguez Román contó con el apoyo del grupo de alcaldes -como el de Alcalá de Guadaira, Antonio Gutiérrez Limones, y de Dos Hermanas, Francisco Toscano- que optó por la candidatura de José Luis Rodríguez Zapatero en el 35º Congreso Federal desde el primer momento y que al hilo de la victoria de éste sobre José Bono reclamó la traslación del cambio tranquilo a la agrupación de Sevilla.En su intervención ante los delegados, Navarrete reprochó a los críticos el intento de patrimonializar la nueva etapa abierta en el PSOE con la llegada de Zapatero. "Que quede claro que esa bandera es de todos los afiliados", afirmó el nuevo secretario general, quien lanzó puyazos contra la otra candidatura al afirmar que su proyecto "no es de hace 15 días" y que él no había pretendido la "reunificación de grupitos que hasta hace cinco días estaban enfrentados".

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Rodríguez Román, que citó en varias ocasiones a Rodríguez Zapatero, no aludió en ningún momento a su rival y se extendió más en explicar su proyecto, en el que el municipalismo es el protagonista esencial, y en reclamar un "cambio constante, tranquilo, sereno y responsable" y la necesidad de "recuperar la pasión por la política".

Tanto Navarrete como Rodríguez Román tuvieron palabras de elogio a la que ha sido la secretaria general del PSOE de Sevilla en los últimos ocho años, Carmen Hermosín, que vio respaldada su gestión con el 93,4% de los votos.

En su informe, que fue a puerta cerrada, la secretaria general saliente se refirió al resultado del congreso federal y reconoció que aunque ella apostó por José Bono, la opción de Zapatero "está funcionando".

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