Estrenos estrictamente teatrales

Las trágicas circunstancias del día apagaron ayer la polémica política que había dado especial significación a los dos estrenos teatrales anoche en Barcelona: el de Arte en el teatro Tívoli y el de El alcalde de Zalamea en la Sala Grande del Teatre Nacional de Catalunya (TNC), que abría la temporada. José María Aznar no asistió al estreno del espectáculo de Josep Maria Flotats por el atentado de ETA y sin él la cita perdió su carga política. Además, se desactivó el sentido de cualquier apoyo de signo político al TNC que se quisiera ofrecer en contrapartida al que Aznar daba a Flo...

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Las trágicas circunstancias del día apagaron ayer la polémica política que había dado especial significación a los dos estrenos teatrales anoche en Barcelona: el de Arte en el teatro Tívoli y el de El alcalde de Zalamea en la Sala Grande del Teatre Nacional de Catalunya (TNC), que abría la temporada. José María Aznar no asistió al estreno del espectáculo de Josep Maria Flotats por el atentado de ETA y sin él la cita perdió su carga política. Además, se desactivó el sentido de cualquier apoyo de signo político al TNC que se quisiera ofrecer en contrapartida al que Aznar daba a Flotats.Ambos estrenos, el de Arte y el de El alcalde de Zalamea quedaron circunscritos al terreno de la noticia cultural. En los dos teatros se guardó un minuto de silencio en memoria del concejal asesinado por ETA. En el Tívoli, este silencio fue precedido por la aparición en escena de Flotats, vestido totalmente de negro, quien dijo al público que, "pese al duelo, nuestro deber como artistas y ciudadanos es hacer el trabajo de cada día".

En en aspecto cultural, la importancia de las dos citas no era poca, ni mucho menos: en el caso de Arte se trataba anoche de la presentación en Barcelona de la que está considerada la mejor obra en los escenarios españoles de los últimos tiempos, amén del retorno al teatro catalán (en castellano) de un actor que disfruta de la admiración y cariño de numeroso público en Barcelona, que, puesto en pie, al final de la obra, premió la actuación de Flotats, Carlos Hipólito y Josep Maria Pou con una ovación de tres minutos.

En el TNC, se trataba también de una cita excepcional: la inauguración de la temporada con el estreno de una obra de Calderón de la Barca. Así, el castellano subía por primera vez al escenario principal del TNC, y de la mano de un director insignia de la renovación del teatro catalán, Sergi Belbel. Entres los asistentes figuraban los consejeros de Cultura, Jordi Vilajoana; Educación, Carme Laura Gil, y Política Territorial, Pere Macias, así como Marta Ferrusola, esposa del presidente de la Generalitat.

Arduino Vannucchi
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