Reportaje:CULTURA Y ESPECTÁCULOS

EL GALÁN DE 'CULEBRONES' QUE RESUCITÓ EL VALLENATO

Todavía era un galán de culebrones, cuando se reencontró con el vallenato. Gracias a ese ritmo caribeño, logró salir de Colombia y viajar por el mundo. Carlos Vives inicia mañana su gira española que le llevará por 13 ciudades.

Carlos Vives aterrizó el viernes en Madrid. El cantante colombiano, de 39 años, llegaba de Puerto Rico, punto final de una gira de dos semanas que le ha llevado de Nueva York a Los Ángeles, pasando por Chicago, San Diego y Boston. Lleva su larga y rizada melena recogida en una coleta y oculta su cabeza con una gorra.Tras el largo viaje, se toma su primer café al mediodía en un hotel de la capital. "Nuestra proyección sonora no deja de ser música tropical. En Estados Unidos hay una colonia latina que ha comprendido siempre nuestras canciones a pesar de provenir de un lugar distinto del Caribe, ...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Carlos Vives aterrizó el viernes en Madrid. El cantante colombiano, de 39 años, llegaba de Puerto Rico, punto final de una gira de dos semanas que le ha llevado de Nueva York a Los Ángeles, pasando por Chicago, San Diego y Boston. Lleva su larga y rizada melena recogida en una coleta y oculta su cabeza con una gorra.Tras el largo viaje, se toma su primer café al mediodía en un hotel de la capital. "Nuestra proyección sonora no deja de ser música tropical. En Estados Unidos hay una colonia latina que ha comprendido siempre nuestras canciones a pesar de provenir de un lugar distinto del Caribe, pero muy cercano del merengue, el son y la cumbia", dice sobre el público norteamericano que ha abarrotado sus conciertos.El rey del vallenato inicia mañana, en la plaza de toros de Castro Urdiales, su gira española, acompañado de diez músicos, virtuosos del acordeón, la guacharaca y la gaita, entre otros. Viene el cantante de Santa Marta precedido de un enorme éxito de ventas. El amor de mi tierra, su cuarto disco, grabado en Miami con Emilio Estefan como productor ejecutivo, y en el que se incluye el corte Fruta fresca, ha vendido 300.000 copias en España. Lleva Vives diez años paseando una imagen moderna de un género que estaba marginado, pero no se siente en absoluto encasillado. "Todo se parece tanto que no me interesan los títulos", argumenta. "La salsa es la urbanización de la música del campo y no creo que tenga una sola manera de proyectarse. Cuando escucho el son cubano me parece estar escuchando vallenato. Por eso no me preocupa cuando me dicen que me parezco mucho a Juan Luis Guerra".

Más información

Vives ha conseguido seis nominaciones para los grammys latinos, más que Fito Paez o Luis Miguel. "No acabo de creérmelo, me parecería un chiste si no fuera porque creo sinceramente que la academia es algo muy serio y que se va a valorar la música en español", añade. En Miami, la noche de las candidaturas coincidió con Rosario y con Juan Luis Guerra y recibió felicitaciones anticipadas de todos los músicos.

Hace apenas diez años, Vives se ganaba la vida en Colombia como actor de telenovelas. Fue con ocasión de una serie para la televisión, en la que interpretaba al hacendado Rafael Escalona, autor de vallenatos, cuando recuperó la música con la que había crecido. "Nací con el vallenato porque era la música de mi ciudad; los músicos son como los juglares que van de pueblo en pueblo para animar fiestas, bodas o cualquier celebración familiar", explica Vives para describir los ritmos populares de los departamentos colombianos de La Guajira y El César. Cuando finalizó la serie televisiva, el actor Carlos Vives dijo adiós a la interpretación y fundó La Provincia, su banda, en la que agrupó músicos populares y rockeros de Bogotá. "Nos va bien porque no hemos perdido el espíritu del vallenato, aunque lo hemos modernizado, pero creo que lo importante de este rito es que se siga manteniendo en los pueblos donde nace".

La situación de Colombia está presente en su música, "pero sin caer en el panfleto". A su juicio, la mejor forma de ayudar a su país es no dejar que caigan en el olvido ni su música ni sus costumbres.

Archivado En