Nieve en la sierra, descenso súbito de temperaturas y vientos intensos
El puerto de Navacerrada recibió ayer la nieve, en pleno mes de junio, aunque con una débil precipitación que no provocó problemas en la carretera. Los chaparrones tormentosos y el acentuado descenso de las temperaturas provocaron la caída de copos de nieve, a partir de las 17.45, que no llegaron a cuajar por ir transformándose, paulatinamente, en gotas de agua.Esta precipitación se centró en el alto del puerto y en una zona aledaña de la Comunidad de Madrid y la provincia de Segovia, en la de Castilla y León.
El fenómeno meteorológico, poco habitual en esta época del año, sorprendió a ...
El puerto de Navacerrada recibió ayer la nieve, en pleno mes de junio, aunque con una débil precipitación que no provocó problemas en la carretera. Los chaparrones tormentosos y el acentuado descenso de las temperaturas provocaron la caída de copos de nieve, a partir de las 17.45, que no llegaron a cuajar por ir transformándose, paulatinamente, en gotas de agua.Esta precipitación se centró en el alto del puerto y en una zona aledaña de la Comunidad de Madrid y la provincia de Segovia, en la de Castilla y León.
El fenómeno meteorológico, poco habitual en esta época del año, sorprendió a los motoristas de Tráfico de la Guardia Civil en manga corta, con el uniforme reglamentario del verano, aunque para estos casos los agentes llevan siempre ropa de abrigo en motos y coches.
Lo sucedido obedeció a que el centro de la península Ibérica, incluido el territorio de la Comunidad madrileña, fue escenario en las últimas 24 horas de un fenómeno atmosférico cuyos efectos más tangibles, además de la nieve recogida en Navacerrada y otros puntos de la sierra, a partir de los 1.500 metros de altitud, fueron las tormentas registradas en distintas zonas de la Comunidad y el descenso generalizado de las temperaturas máximas, que llegarán hasta los 8 grados centígrados en las próximas horas.
Según Ángel Rivera, jefe del área de Predicción del Instituto Nacional de Meteorología, una vaguada de aire frío permaneció activa en las pasadas 24 horas sobre el centro de la Península y dio lugar a una borrasca de niveles altos, a unos 5-6 kilómetros de altitud, más otra borrasca en capas bajas que a media tarde de ayer descargaba sobre la comunidad de Aragón. La alta borrasca mantuvo unas horas su bloque de perturbación sobre el centro de España y un borde de ataque que se desplazaba a unos 70 kilómetros por hora en dirección hacia el noreste de la Península. El fenómeno atmosférico presenta alguna semejanza al de la denominada gota fría, si bien sus efectos no son tan intensos, precisó Ángel Rivera, informa Luis Fernando Durán.