Geena Davis y Bette Midler se lanzan a la telecomedia en EEUU
Aparentemente, sólo el gancho de estrellas de Hollywood puede hacer remontar el panorama de las telecomedias en Estados Unidos, afectadas actualmente por la falta de imaginación, de renovación y, por encima de todo, de audiencia. Las actrices Bette Midler y Geena Davis probarán fortuna en este formato con sus propias comedias a partir de octubre, y también regresa al género el actor Michael Richards, el legendario Kramer en la serie Seinfeld. Aunque los pilotos no han despertado demasiado entusiasmo, del éxito que obtengan estos tres productos depende en buena medida el futuro de la telecomedi...
Aparentemente, sólo el gancho de estrellas de Hollywood puede hacer remontar el panorama de las telecomedias en Estados Unidos, afectadas actualmente por la falta de imaginación, de renovación y, por encima de todo, de audiencia. Las actrices Bette Midler y Geena Davis probarán fortuna en este formato con sus propias comedias a partir de octubre, y también regresa al género el actor Michael Richards, el legendario Kramer en la serie Seinfeld. Aunque los pilotos no han despertado demasiado entusiasmo, del éxito que obtengan estos tres productos depende en buena medida el futuro de la telecomedia convencional.
Cada año, las principales televisiones de Estados Unidos estrenan entre 25 y 30 telecomedias en su formato clásico; es decir, media hora de duración (21 minutos de contenido real), grabadas ante público real y con risas enlatadas. Las cadenas cancelan 8 de cada 10 de ellas antes de que cumplan un año en antena o incluso después de que tan sólo se hayan emitido apenas cuatro o cinco episodios. En los últimos cinco años, sólo dos o tres telecomedias han logrado destacar y perdurar en un panorama mediocre, lleno de tramas desgastadas y personajes repetidos. Al margen de Will and Grace (del histórico James L. Brooks) y Raymond, la telecomedia es un género "a punto de morir", según ha vaticinado un crítico del periódico The New York Times. Tampoco colabora en su supervivencia el éxito inesperado y aplastante de los concursos y de los programas basados en la realidad, como Survivor.
En las rejillas de programación de la próxima temporada las cadenas tratarán de revitalizar la telecomedia con el fichaje de grandes estrellas.
Regreso a la televisión
La ABC estrenará Lost and found, que supone el regreso a la pequeña pantalla de la actriz Geena Davis ( Thelma y Louise) después de 15 años de ausencia (en la televisión empezó su carrera) y un Oscar de por medio por la película El turista accidental.
La nueva telecomedia protagonizada por Davis gira en torno a una mujer triunfadora que se casa con un hombre de clase baja, viudo y con hijos (interpretado por Peter Horton, de la serie Treintaytantos). En un papel secundario aparece la actriz Mimi Rogers. De la producción ejecutiva se encarga el equipo que creó la comedia Sexo en Nueva York (actualmente emitida en España por Canal +).
Según la revista especializada en entretenimiento The Hollywood Reporter, Davis se comprometió con la serie a cambio de más de 200.000 dólares por episodio (unos cuarenta millones de pesetas, no demasiado para el mercado) y, sobre todo, la garantía de que se emitirán al menos 22 entregas. También es posible que Davis haya cerrado al mismo tiempo acuerdos cinematográficos con Disney, la compañía propietaria de la ABC.
Si a esta cadena no se le escapa que Geena Davis es una de las actrices favoritas del público de EE UU, la CBS ha reclutado a otra de las preferidas: Bette Midler. La actriz, de 55 años, protagonizará The Bette show, una telecomedia sobre la vida de una diva en Nueva York, que bordea lo autobiográfico.
Y una tercera apuesta para la próxima temporada: Michael Richards, el vecino gorrón de Seinfeld, es el primer actor de esta serie protagonizada por el cómico Jerry Seinfeld que vuelve a trabajar en televisión.
El episodio piloto de la telecomedia de Richards para la NBC -en torno a un desastroso detective privado- ha recibido malas críticas entre quienes lo han visto; sin embargo, cuando se ha ofrecido a grupos de espectadores de prueba, a todos les ha encantado el personaje protagonista. Por eso la productora ha despedido a los secundarios y está volviendo a escribir los guiones.