Los candidatos a la dirección del PSOE aplazan las alianzas

Los aspirantes a la secretaría general del PSOE rehúyen pactar entre sí para cosechar el máximo apoyo en el proceso de elección que empezó ayer y culminará con los congresos regionales el 25 de junio, con la designación del millar de delegados que decidirán quién es el próximo líder del partido. La lucha por el delegado ha empezado con fruición y ha hecho caer en saco roto las pretensiones de formar grupos o alas ideológicas. Iniciativa para el Cambio, con la excepción de Juan Alberto Belloch, que desvela su apoyo a José Bono, trata de que sus enmiendas de apertura triunfen entre los delegados...

Los aspirantes a la secretaría general del PSOE rehúyen pactar entre sí para cosechar el máximo apoyo en el proceso de elección que empezó ayer y culminará con los congresos regionales el 25 de junio, con la designación del millar de delegados que decidirán quién es el próximo líder del partido. La lucha por el delegado ha empezado con fruición y ha hecho caer en saco roto las pretensiones de formar grupos o alas ideológicas. Iniciativa para el Cambio, con la excepción de Juan Alberto Belloch, que desvela su apoyo a José Bono, trata de que sus enmiendas de apertura triunfen entre los delegados.

Desde este fin de semana los militantes socialistas participan desde sus agrupaciones locales en la elección de delegados y en la discusión de la ponencia-marco. En el lenguaje socialista se conoce como "los congresillos", a los que dan relativa importancia ya que muchos reservan sus fuerzas para los congresos regionales que se celebrarán mayoritariamente entre el 22 y 23 de junio, que es de donde saldrán los delegados que irán al congreso federal de julio. Algunos candidatos tratan de actuar como si de unas elecciones primarias se tratara, pero son conscientes de que no hay similitud alguna. Los delegados se eligen en listas cerradas y bloqueadas entre distintas candidaturas. Para tener acceso a la lista final hay que obtener el 20%. Rosa Díez recorre federación tras federación pidiendo el apoyo, así como Matilde Fernández y José Luis Rodríguez Zapatero. Este último no habla en primera persona, sino que se presenta como "Nueva Vía, un equipo que quiere renovar el proyecto socialista".José Bono, en viaje como presidente de Castilla-La Mancha a EE UU hasta el próximo día 8, ha hecho una primera labor de "peinado" de las federaciones más importantes y ya sabe dónde puede encontrar apoyos, por lo que aguardará hasta que los delegados hayan sido elegidos para anunciar su candidatura.

Todos se han reunido con todos en un ambiente cordial para calibrar si podía haber fusiones antes de la elección de delegados. Los interesados han llegado a la conclusión de que ninguno lo iba a hacer aunque las cábalas sobre posibles combinaciones están a la orden del día en el PSOE. A Rodríguez Zapatero le cuesta desprenderse de la tesis de que ya ha pactado con José Bono. Se lo preguntan sin excepción los asistentes a las reuniones que protagoniza para darse a conocer. Niega cualquier pacto, aunque repite que en el congreso habrá que procurar la formación de una mayoría. La incógnita está en saber en torno a quién.

Rosa Díez encuentra coincidencias con Iniciativa para el Cambio, aunque un sector del guerrismo y de la corriente Izquierda Socialista atisbó la posibilidad de formar un bloque con la gente de Manuel Escudero.

Candidato

Nada es blanco o negro. El ex ministro Juan Alberto Belloch se reconoce muy cercano a las tesis de Inicitiva para el Cambio, pero sabe quién es su candidato: "Apoyaré a quien defienda los planteamientos de Iniciativa, y estoy convencido de que José Bono los comparte y, además, será un excelente candidato".

Su grupo, Iniciativa para el Cambio, no se ha inclinado oficialmente por ningún candidato y afronta el proceso con la certeza de que su lucha es desigual porque proponen un cambio radical de las estructuras del partido, de la manera de elegir a los candidatos, a los delegados y a los cargos orgánicos y, para su pesar, no son los militantes los que pueden aprobarlo, sino que el poder sigue estando en los aparatos provinciales y regionales. La desazón va en aumento en este grupo al comprobar que los candidatos en liza o bien apenas hacen referencia a la democratización del partido o posponen los cambios. Esto significa, según señala Escudero, que todos los congresos provinciales y regionales, que se celebrarán en septiembre, se regirán por las normas actuales. De todo esto Escudero ha conversado con Rosa Díez, José Luis Rodríguez Zapatero, José Bono y Matilde Fernández. Todos le han "decepcionado" y singulariza en Rosa Díez porque pensó que estaba en la misma línea, pero en las enmiendas que ha presentado esta candidata a la ponencia-marco también pospone los cambios.