Joan Sifre es reelegido secretario general de CC OO-PV con el apoyo del 93% de los votos

CC OO-PV ha cerrado en su 7º Congreso, que se clausura hoy en Valencia, el conflicto abierto hace cuatro años con el relevo del histórico Antonio Montalbán. Ayer los sectores mayoritario y crítico consensuaron, a última hora, una lista única encabezada por Joan Sifre, reelegido secretario general de la confederación valenciana con el 93% de los votos del congreso. "Podemos aceptar matices, pero hay una sola dirección y un solo proyecto confederal", quiso aclarar Sifre. El 83% de los delegados al congreso respaldaron el informe de gestión de la anterior ejecutiva.

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CC OO-PV ha cerrado en su 7º Congreso, que se clausura hoy en Valencia, el conflicto abierto hace cuatro años con el relevo del histórico Antonio Montalbán. Ayer los sectores mayoritario y crítico consensuaron, a última hora, una lista única encabezada por Joan Sifre, reelegido secretario general de la confederación valenciana con el 93% de los votos del congreso. "Podemos aceptar matices, pero hay una sola dirección y un solo proyecto confederal", quiso aclarar Sifre. El 83% de los delegados al congreso respaldaron el informe de gestión de la anterior ejecutiva.

No se alcanzaba este grado de consenso en CC OO del País Valenciano desde la celebración del primer congreso del sindicato elebrado en el año 1978. El 7º Congreso, que se clausura hoy en el Palacio de Congresos de Valencia con la participación del secretario general José María Fidalgo, ha resultado ser el de la normalización interna después de un periodo de desencuentro entre la mayoría y los críticos.El relevo en el 6º Congreso del sindicato, hace ahora cuatro años, en el que Joan Sifre sustituyó a Antonio Montalbán al frente de la secretaría general, partió en dos la confederación valenciana. La candidatura de Sifre salió entonces adelante con el 54% de los votos del congreso. Cuatro años después la comisión ejecutiva liderada por Sifre ha logrado el respaldo del 96% de los delegados. "Todas las miradas están pendientes de cómo se resuelve este conflicto", reconocía abiertamente Sifre poco antes de la votación.

"Señala, además", agregó, "un avance cualitativo en la solución de un desencuentro todavía vivo". El todavía candidato a la secretaría general aclaró, sin embargo, con firmeza que el sindicato "podrá aceptar matices, pero el proyecto y la dirección confederal es único", recalcó. Según Sifre, este consenso acaba con las coartadas porque "hace falta un nuevo impulso para trabajar más y mejor". El dirigente destacó de la nueva comisión ejecutiva, compuesta por 18 personas, la importante incorporación de las mujeres -representan un 45% de la nueva dirección-. "No es una graciosa concesión", destacó Sifre, "sino una manera de empezar a resolver un problema sindical de primera magnitud", apostilló el sindicalista.

Sifre dio las gracias por su contribución a los miembros de la anterior ejecutiva que dejan el cargo y aprovechó para pedir disculpas a los que "se sientan dolidos por la confección de las listas, porque, a veces, decimos, pontificamos y clasificamos más de lo que debemos". Abandonan la dirección, entre otros, Fernando Rodrigo, responsable de Salud Laboral, Encarna Signes, responsable de Política Europea; Neus Pont, de la Secretaría de la Dona, Gracia Santos, de la fundación Pau i Solidaritat; y Francesc Fenollosa.

Unas horas antes de la intervención de Sifre, el sector crítico había presentado dentro su propia candidatura, encabezada por Roberto Ruiz. Los críticos retiraron su lista después de que el sector oficial integrara en su lista a cinco de sus representantes. "Esta mañana [por ayer] hemos acercado posiciones y aunque nuestras peticiones no se han asumido totalmente, sí hemos llegado a un punto de acuerdo en temas importantes para nosotros, como las ETT, la jornada laboral de 35 horas semanales y la seguridad en el trabajo", explicó Ruiz. El acuerdo no reserva ninguna de las carteras para este sector si bien éstos confían en acceder a alguna de ellas. La distribución de responsabilidades se producirá en unos días.

Los 12 componentes restantes de la comisión ejecutiva, aparte está el secretario general, representan a la mayoría de CC OO-PV. La lista presentada ayer la componían: Joan Sifre, Abraham Canales (Juventud), Amparo Martínez (Sanidad), Eva Hernández (Juventud), Fernando Casado (repite), Inmaculada Martínez, Juan Ortega (repite), Juan Pedro García Segovia, Martín Carpena (repite), Miguel Segarra (repite), Neus Carrasco (Enseñanza), Ofelia Vila (Enseñanza), Salvador Piera (repite); y los críticos Roberto Ruiz (Sanidad), Carmen Ciscar (Sanidad), Empar Alegria (Transportes), José Francisco Mata (Metal) y Margarita Sanz (Enseñanza). El sindicato ha desdoblado la secretaría general de Empleo y Relaciones Laborales y creado una nueva de Información, Publicaciones y Atención al Afiliado.

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Esta lista obtuvo 318 votos a favor (96%), tres en contra y 10 abstenciones. Joan Sifre, el único que presentó candidatura a la secretaría general de la confederación valenciana, fue reelegido por 316 votos favorables (93%), tres en contra y 18 abstenciones.

"Ni pensamiento único ni coartadas"

El informe de gestión presentado por el secretario general el jueves tras la apertura del congreso -cerca de una hora de exposición- fue respaldado por el 83% de los delegados al congreso. Pero no todo fueron flores. Dirigentes de Fecoma, una de las federaciones con más peso y críticas con la dirección, le recriminaron ayer que no hayan coordinado más la negociación colectiva y, sobre todo, su complacencia en la firma de algunos acuerdos con los gobiernos central y autonómico. Esta federación pidió la creación de un gabinete de organización del trabajo, que dé respuestas a cuestiones como incentivos de trabajo, reparto de tiempos y producción a destajo. Este sector recordó el "doloroso" proceso de los últimos cuatro años "con actitudes excluyentes por parte de la mayoría", declaró Ventura Montalbán.La federación del metal pidió que se reconociera en el informe la contribución del sindicato en la atracción de inversiones a Sidmed, en Sagunto, y la resolución del conflicto en Manises Diesel.

En su turno de réplica, Sifre agradeció las aportaciones de todas las federaciones. "El balance es, en general, positivo", dijo el secretario de la gestión de la dirección. Éste negó que su informe careciese de autocrítica. "Sí la hay, tal vez demasiado pormenorizadamente", dijo. El dirigente tampoco aceptó las acusaciones de "autocomplacencia y triunfalismo" con que algunos se refirieron a su gestión. "Ni tenemos un pensamiento único ni hemos justificado la reforma laboral", subrayó.

Después de este congreso, Sifre anunció una gestión de objetivos, donde no habrá más coartadas y los delegados deberán asumir una corresponsabilidad real.

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