El Valladolid elimina al Gáldar en los penaltis y se clasifica

El rito de los duelos a muerte se cumplió de forma radical: nervios, tensión máxima, heridas e incertidumbre hasta después del último segundo. Tras la prórroga de cinco minutos, el Valladolid se impuso en la lotería de los penaltis. El Gáldar partía como favorito, pero la situación cambió cuando se rompió el tobillo izquierdo de su gran estrella, Rájic. El otro extranjero, Paraschenko, renquea por una lesión en el tendón de Aquiles. Para colmo, Prieto sufrió dos exclusiones en los primeros minutos. Pero Jordi Ribera logró mantener el ritmo pausado que distingue a su equipo, muy adecuado ante e...

El rito de los duelos a muerte se cumplió de forma radical: nervios, tensión máxima, heridas e incertidumbre hasta después del último segundo. Tras la prórroga de cinco minutos, el Valladolid se impuso en la lotería de los penaltis. El Gáldar partía como favorito, pero la situación cambió cuando se rompió el tobillo izquierdo de su gran estrella, Rájic. El otro extranjero, Paraschenko, renquea por una lesión en el tendón de Aquiles. Para colmo, Prieto sufrió dos exclusiones en los primeros minutos. Pero Jordi Ribera logró mantener el ritmo pausado que distingue a su equipo, muy adecuado ante el frenesí del Valladolid. Su colega Juan Carlos Pastor también hizo frente al infortunio: Romero se lesionó en un dedo, aunque siguió jugando. El resto fue una lucha trepidante con más emoción que calidad. El Valladolid, con una media de edad muy baja y tras eliminar al Portland (actual campeón), transformó su ilusión en un éxito histórico.

Gáldar (26): Moyano, Saavedra (3), Rájic (1), Muñoz (6, dos de penalti), De la Hoz (2), Prieto (2), Bermejo (2); Parachenko, Redondo (4), Suárez (1), Rodríguez (5) y T. García.

Valladolid (26): Martínez (p), Davis, Romero (3), Raúl (4), López (1), R. García (7, uno de penalti), Pisonero (7, cuatro de penalti); Cortés, De Uribe (2), Dasilva (2), Rodríguez y Malumbres.