Entre Ángel Pestaña y Josep Pallach
Raimon Martínez Fraile, que ocupa el cuarto lugar en la lista del PSC, nació en San Cristóbal de la Polantera (León) hace 52 años. Iba para historiador, pero en su camino se cruzó una expulsión de la Universidad y, sobre todo, un pensador de notable influencia en la Cataluña de principio de los setenta: Josep Pallach, que lo convenció de la necesidad de la militancia política. De su mano entró en el PSC (Reagrupament), desde donde pasó al PSC actual.Estudió en el seminario conciliar, pero lo abandonó ya en primero de Filosofía para cursar Historia. Militó en el SDEUB (Sindicato Democrático de ...
Raimon Martínez Fraile, que ocupa el cuarto lugar en la lista del PSC, nació en San Cristóbal de la Polantera (León) hace 52 años. Iba para historiador, pero en su camino se cruzó una expulsión de la Universidad y, sobre todo, un pensador de notable influencia en la Cataluña de principio de los setenta: Josep Pallach, que lo convenció de la necesidad de la militancia política. De su mano entró en el PSC (Reagrupament), desde donde pasó al PSC actual.Estudió en el seminario conciliar, pero lo abandonó ya en primero de Filosofía para cursar Historia. Militó en el SDEUB (Sindicato Democrático de Estudiantes Universitarios de Barcelona). Una adscripción que le costó la expulsión de la Universidad, expediente que firmó el entonces rector Alfonso García-Valdecasas (padre de la actual delegada del Gobierno).
Martínez Fraile no pertenecía entonces a ningún partido, sino que estaba vinculado a la organización católica Pax Christi. Entre sus compañeros de aulas estaba su correligionario Joaquim Nadal, alcalde de Girona y diputado autonómico.
Se licenció con una tesina sobre las críticas del anarquismo catalán a la Revolución de Octubre. Su tesis doctoral había de versar sobre el libertario Ángel Pestaña, pero se quedó en proyecto. Dio clases en La Salle Bonanova y en la Facultad de Económicas, de donde fue expulsado por una supuesta militancia en el PSUC.
En las primeras municipales democráticas entró como concejal en el Ayuntamiento de Barcelona junto a Narcís Serra y se mantuvo con Pasqual Maragall, antes de salir de forma casi traumática.
Tras un periodo en una firma privada pasó a Renfe. En los últimos tiempos ha dirigido el Patronato de Turismo de Barcelona. Ante las últimas municipales hizo el amago de presentarse a la primarias frente a Joan Clos. Los amigos le hicieron desistir.