Herido un guardia civil en el ataque con 36 "cócteles mólotov" contra el cuartel de Galdakao

Un guardia civil ha resultado herido tras atacar varios encapuchados el cuartel de Galdakao (Vizcaya) con 36 cócteles mólotov. El agente, que ha sido trasladado al hospital de Cruces-Barakaldo, presenta quemaduras en el cuello y en el oído, que precisan de cirugía plástica. Su pronóstico es leve.El ataque se registró a la 1.50 de ayer, cuando varios individuos, que posteriormente se dieron a la fuga, lanzaron contra las instalaciones del cuartel de Galdakao los artefactos incendiarios, la mitad de los cuales explosionaron en el interior de las instalaciones. Además de las heridas del agente, e...

Un guardia civil ha resultado herido tras atacar varios encapuchados el cuartel de Galdakao (Vizcaya) con 36 cócteles mólotov. El agente, que ha sido trasladado al hospital de Cruces-Barakaldo, presenta quemaduras en el cuello y en el oído, que precisan de cirugía plástica. Su pronóstico es leve.El ataque se registró a la 1.50 de ayer, cuando varios individuos, que posteriormente se dieron a la fuga, lanzaron contra las instalaciones del cuartel de Galdakao los artefactos incendiarios, la mitad de los cuales explosionaron en el interior de las instalaciones. Además de las heridas del agente, el ataque ocasionó desperfectos por valor de unos ocho millones de pesetas.

Durante la noche del viernes también se produjeron incidente de violencia callejera en la localidad vizcaína de Gernika, cuando otro grupo de encapuchados lanzó varios artefactos contra una sucursal bancaria. Igualmente fueron atacados con cócteles mólotov la sede del Partido Socialista de Euskadi (PSE) de Durango y un concesionario de Peugeot en Santurtzi, también en Vizcaya.

Por otra parte, el protavoz de Euskal Herritarrok (EH), Arnaldo Otegi, convocó ayer a una huelga general para el próximo día 27 de enero, con el objetivo de demandar la "repatriación" de los presos de la organización terrorista ETA.

El PNV se desmarcó ayer de esa convocatoria cuando su portavoz, Joseba Egibar, aseguró ayer en San Sebastián que se trata de una medida "absolutamente equivocada, inadecuada y desproporcionada" y que no conseguirá "la cohesión de la mayoría de la sociedad vasca". Este tipo de convocatorias, añadió, "no tienen encaje no siquiera entre la propia izquierda abertzale.

Sin embargo el presidente del PNV, Xabier Arzalluz, se solidarizó ayer con las reivindicaciones de los presos al visitar al grupo de 180 personas que están en huelga de hambre desde el lunes en unas escuelas de Bilbao. Los huelguistas reprocharon al presidente del PNV el escaso compromiso en favor de los reclusos que han detectado en el PNV de Vizcaya.