Crítica:

Marius y Jeannette

22.00 / Drama / Canal +Fr., 1997. Dir.: Robert Guediguian. Int.: Ariane Ascaride, Gerard Meylan. Guediguian (De todo corazón) hunde el drama en el día a día donde se aprietan los fracasos, las renuncias y las esperanzas más elementales. En los suburbios de Marsella, una pareja (vigilante de una fábrica, él; cajera y madre de dos hijos, ella) reclama su derecho a enamorarse. El director recupera así el brillo de las emociones simples sin por ello renunciar al sincero y esmerado dibujo de las sombras. Unas sombras alimentadas de pura y evidente injusticia. La cinta posee el...

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22.00 / Drama / Canal +Fr., 1997. Dir.: Robert Guediguian. Int.: Ariane Ascaride, Gerard Meylan. Guediguian (De todo corazón) hunde el drama en el día a día donde se aprietan los fracasos, las renuncias y las esperanzas más elementales. En los suburbios de Marsella, una pareja (vigilante de una fábrica, él; cajera y madre de dos hijos, ella) reclama su derecho a enamorarse. El director recupera así el brillo de las emociones simples sin por ello renunciar al sincero y esmerado dibujo de las sombras. Unas sombras alimentadas de pura y evidente injusticia. La cinta posee el destello de verdad, alegre e hiriente a la vez, que ampara los trabajos de Jean Renoir hasta La regla del juego. Más en concreto: Toni (1935). La intensidad de lo real y el cosquilleo de las sensaciones a flor de piel se enhebran en una tragedia feroz, cálida y muy humana, que respira por el trabajo de dos actores enormes. El entusiasmo tiene razón de ser.

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