El Cáceres tampoco perdona al Madrid
Arcega y Abrams se exhibieron y derribaron al conjunto de Scariolo
Al dictado de Pepe Arcega y con Abrams sembrando el terror en ambas zonas, el Cáceres hizo encajar al Madrid su segunda derrota, en un partido al que no le faltó nada, ni siquiera polémica, por una posible falta personal a favor del Madrid que no fue señalada cuando el partido estaba a punto de morir. Pero el Cáceres fue superior a un Madrid al que, de momento, el cambio del cambio no ha dado más que disgustos. El roto que Abrams le hizo al Madrid fue de cuidado. El americano, un tipo que guarda ciertas semejanzas físicas con Barkley, se sintió iluminado y añadió a sus 29 puntos la friolera d...
Al dictado de Pepe Arcega y con Abrams sembrando el terror en ambas zonas, el Cáceres hizo encajar al Madrid su segunda derrota, en un partido al que no le faltó nada, ni siquiera polémica, por una posible falta personal a favor del Madrid que no fue señalada cuando el partido estaba a punto de morir. Pero el Cáceres fue superior a un Madrid al que, de momento, el cambio del cambio no ha dado más que disgustos. El roto que Abrams le hizo al Madrid fue de cuidado. El americano, un tipo que guarda ciertas semejanzas físicas con Barkley, se sintió iluminado y añadió a sus 29 puntos la friolera de 15 rebotes. Scariolo intentó detenerle con Struelens, sin éxito. Y con Larsen, que también fracasó. Y con Gnad. Nada de nada. Y, en fin, con Iturbe, que a la postre fue el único que hasta cierto punto limitó la exhibición del estadounidense.
CÁCERES 73
REAL MADRID 68Cáceres: José Ángel Arcega (10), Rodríguez (13), Paraíso (11), Abrams (29), Keith Hill (6); Carlos Montes (2), Pedrera (2), Coego (0) y Álvarez (0). Real Madrid: Jennings (14), Alberto Angulo (10), Herreros (17), Scott (11), Struelens (6); Larsen (4), Lucio Angulo (3), Gnad (0), Iturbe (3) y Galilea (0). Árbitros: Llamazares, Herrezuelo y García González. Cerca de 6.000 espectadores en el Pabellón Ciudad de Cáceres.
Pese a que el Madrid cuenta con un buen número de variantes ofensivas, ayer sólo encontró una. La habitual. La de Herreros, claro. Él levantó al Madrid cuando más sufría (54-45, m.25) y le hizo soñar (58-59, m.33). Pero al Madrid se le vio siempre triste, como si la última derrota ante el Fuenlabrada hubiera arrojado cal sobre sus ilusiones. Jennings intentó acelerar el partido, pensando, quizá, que Arcega no aguantaría su ritmo. Pero lo aguantó, vaya que sí. Él gobernó el partido y Abrams hizo todo lo demás, léase, fulminar a todo un Madrid.
En otro partido de ayer: Breogán, 64; Fórum, 89.